El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, le recordó este viernes al empresario Marcelo Claure que los cielos de Bolivia están abiertos al mundo y todos quienes desean invertir en el campo aeronáutico son bienvenidos, “no necesita pedirle nada a nadie”.
Fuente: ABI
“El pueblo boliviano debe saber que, si él (Claure) o cualquier persona quiere abrir una aerolínea, no necesita pedirle nada a nadie, los cielos de Bolivia están abiertos al mundo y todos son bienvenidos”, afirmó Montenegro en un post publicado por el Ministerio de Economía en su cuenta de Facebook.
De esta forma respondió al empresario Claure, quien indicó por sus redes sociales que “si abren los cielos en Bolivia y me garantizan seguridad jurídica en 60 días llevamos 20 aviones y damos el servicio y la SEGURIDAD que necesita Bolivia”.
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Añadió que Montenegro tenía su número de teléfono.
Montenegro le respondió: «Aclaro públicamente que no tengo el teléfono del señor Marcelo Claure ni nunca nos comunicamos por Whatsapp, tuvimos una reunión virtual propiciada por terceros”.
Se trata de la segunda vez que Claure alude a que tuvo una conversación por teléfono con Montenegro.
El lunes 3 de febrero, el empresario, que reside en Estados Unidos desde hace años, dijo a Red UNO que recibió una “llamada” del gobierno boliviano cuando surgió la falta de divisas.
Montenegro replicó el 4 de febrero que no fue una llamada o contacto por WhatsApp, sino una reunión virtual que propició un tercero por una plataforma.
“Claure jamás va a poder demostrar eso, porque nunca ha habido WhatsApp. Lo que sí hubo fue una reunión virtual, una conversación donde planteó cosas muy generales, que luego se exploraron y se vieron inviables”, recordó.
En esa reunión, el magnate habría planteado que tenía contactos e intereses en la industria del litio, no obstante, el Gobierno mencionó la posibilidad de emisión de bonos, en el marco del Presupuesto General del Estado 2024.
Claure delegó a personal especializado “para evaluar ciertas estructuras imaginativas”. Sin embargo, las estructuras financieras sugeridas por Claure fueron inviables y no hubo continuidad en las conversaciones sobre la inversión en bonos soberanos.
Rdc/Jfcch/CC