Nuevos detalles del complejo proceso de votación han sido revelados.
Por Virginia García
Fuente: Infobae
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Las votos anónimos de los Oscar se han convertido en un tema controvertido entre los expertos en cine. Mientras algunos las consideran una distracción de un resultado ya determinado, otros las ven como una herramienta de análisis. Hay algo de verdad en ambas posturas.
Desde 2012, el proceso ha cambiado drásticamente. Anteriormente, los votantes asociados a la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas delegaban sus boletas para que terceros eligieran por ellos, así que actualmente se ha digitalizado completamente el proceso y reforzado la seguridad con autenticación de dos pasos, haciendo que esta práctica sea casi imposible.
La Academia no ha revelado cifras oficiales sobre la participación de votantes, aunque expertos estiman que oscila entre un 30% y un 70% de los 9,945 miembros con derecho a voto.
En un artículo con la revista Variety, donde se consultó a 84 miembros de la Academia, representando diversas edades, trayectorias y nacionalidades, se mostró que existe un patrón que las estadísticas por sí solas no pueden captar.
Por ejemplo, en la categoría de Mejor Película, el sistema de votación de clasificación influye enormemente en el resultado. Si fuera un sistema de voto único, The Brutalist podría imponerse sobre el resto de las cintas nominadas. Sin embargo, al no ser la primera opción de muchos votantes, su rendimiento se diluye. Películas como Anora, Conclave y Wicked han sido recurrentes en segundas y terceras posiciones, lo que podría favorecerlas en las rondas finales de recuento.
“¡Veo todo! Odio que la gente no se tome en serio este trabajo. Es nuestra responsabilidad verlo todo… Cuando no lo hacemos, nos perdemos obras maestras como ‘The Substance’ y ‘Emilia Pérez’”, señaló uno de los votantes anónimos consultados por el medio.
A su vez, las predicciones actuales sugieren que Dune: Part Two, The Substance y Nickel Boys podrían ser las primeras eliminadas, dejando un espacio abierto para que Anora o Conclave tomen la delantera.
Por su parte, en la carrera por el galardón a Mejor Actriz se ha reducido a un enfrentamiento entre Mikey Madison (Anora) y Demi Moore (The Substance), aunque Cynthia Erivo (Wicked) y Fernanda Torres (I’m Still Here) también tienen apoyo significativo. En Mejor Actor, Timothée Chalamet (A Complete Unknown) ha sorprendido al vencer en los SAG Awards, desafiando el dominio de Adrien Brody (The Brutalist).
Sin embargo, los votantes también han mostrado interés en Ralph Fiennes (Conclave), cuyo reconocimiento podría estar subestimado. Curiosamente, algunos votantes no lo eligieron creyendo erróneamente que ya había ganado un Oscar por Schindler’s List.
Es así que las tendencias sugieren que podría ser un año sin un claro dominador. Se perfila un escenario donde hasta seis películas podrían llevarse dos premios cada una, con ningún título arrasando en la ceremonia.
Películas como Anora y Conclave parecen ser las apuestas más seguras para Mejor Película, con Anora captando apoyo entre los votantes más jóvenes y la rama de actores, mientras que Conclave es popular entre miembros de mayor edad y las ramas técnicas: “’Anora’ es la única película que es una verdadera película”, colocó uno de los votantes en su papeleta según la revista Variety
Cabe destacar que la cinta Emilia Pérez, la cual fue la más nominada este año con 13 menciones, no obtuvo la reacción deseada y no cambió tantas opiniones como se podría haber esperado. De acuerdo con la revista Variety, un estratega de premios plantea una teoría: “La baja participación de los votantes en la fase de nominaciones sugiere que no se requiere un gran respaldo para asegurar una candidatura”, por lo que eso hace más difícil que obtenga el galardón.
En definitiva, los Oscar 2024 se perfilan como una ceremonia impredecible, con varias categorías abiertas hasta el último momento. Mientras los analistas hacen sus últimas predicciones, la única certeza es que los votantes de la Academia tienen la última palabra.