Pablo Andrés Velarde, Mirtha Fuentes y Roberta Velarde salieron del centro de salud al que fueron ingresados después de ser hallados en medio de la selva beniana, donde pasaron dos días sin agua ni alimento
El piloto (de polera gris) es un joven de 27 años que supo hacer las maniobras para evitar una tragedia
Fuente: UNITEL
Pablo Andrés Velarde, Mirtha Fuentes y Roberta Velarde recibieron el alta médica tras sobrevivir al accidente aéreo ocurrido en Beni. Los tres fueron hallados junto a otras dos personas después de permanecer más de dos días en medio de la selva, sin agua ni alimentos, tras el aterrizaje forzoso de la avioneta en la que viajaban hacia Trinidad.
El piloto, de 27 años, relató que la aeronave tuvo una falla en el motor mientras cubría la ruta Baures-Trinidad, explicando que sobre la ruta no había estancia o camino para un aterrizaje de emergencia. El aterrizaje fue brusco y la avioneta quedó boca abajo.
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Velarde mantuvo la calma y pidió a sus pasajeros que se preparen para lo peor. “Apagué todo, cerré gasolina y dije ‘vamos, que sea lo que Dios quiera’. Aterrizamos y sentimos el golpe. Luego todo fue rápido, tragamos agua”, relató. La zona era inhóspita y pantanosa, lo que complicó aún más la situación.
Mirtha Fuentes, una de las pasajeras, agradeció a Dios y al piloto por su reacción. “Lloramos de felicidad porque estábamos vivos. Gracias a la rapidez e inteligencia del piloto, lo supo hacer muy bien”, afirmó desde su cama de hospital
Los cinco ocupantes pasaron dos noches en medio del agua y el lodo, temiendo a los animales salvajes, señalando que casi no se movían ante el temor por los lagartos y felinos. ”Solo orábamos y esperábamos el rescate”, contó Velarde. Comieron chocolate y chivé, alimentos que Fuentes llevaba en su equipaje.
Pese a la desesperación, lograron mantenerse sobre el fuselaje de la avioneta. El viernes de madrugada, escucharon una embarcación cercana y usaron la luz del celular del piloto para pedir auxilio. La señal fue respondida y los pescadores alertaron a las autoridades.
Poco después, un helicóptero de rescate logró ubicarlos. Estaban agotados, pero conscientes y sin heridas de gravedad. El niño también fue evacuado en buen estado. Los sobrevivientes fueron llevados a un centro médico de Trinidad para su recuperación.
Ahora, tres de los cinco ya fueron dados de alta. El piloto y sus pasajeros recuerdan con emoción los momentos vividos. “Fue una experiencia límite, pero gracias a Dios salimos con vida”, concluyó Velarde. Aún se espera el alta médica para Patricia Coria y el menor I.T.C.
Fuente: UNITEL