Gustavo Adolfo Navarro
Los restos de lo que un día fue Santa Cruz de la Sierra, descansan bajo una grotesca y monolítica capa del más ordinario cemento. Sobre su tumba ideológica, deambula un pueblo taciturno, extraviado tras la última aventura de sus élites conservadoras y cobardes, cuyo proyecto político mediocre, colisionó contra el muro hegemónico del masismo. Esta orfandad ideológica postraumática, ha dejado el rumbo de la ciudad a la deriva, denotándose además, una fuerte crisis de identidad, que no muestra ni el más mínimo signo de recuperación. Como señala Fernando Prado Salmon, esta es la consecuencia de hacer confluir a la ideología de las élites locales con la identidad cruceña, a lo cual se podría agregar, que muchos de los mitos y símbolos de la “historia bien” de nuestra ciudad, junto al accionar de sus instituciones conservadoras, no han podido estar a la altura de las grandes transformaciones socio-políticas, que de manera desorganizada, han ido irrumpiendo en Santa Cruz a partir de la revolución del 52. Con el reciente fracaso del proyecto político regional, el vacío simbólico de la identidad cruceña, que la ideología elitista había taponado precariamente, quedó totalmente al desnudo. En consecuencia no sabemos quiénes somos y tampoco hacia dónde vamos como ciudad. Esa es la realidad del pueblo cruceño. Una buena muestra de esta crisis de identidad, se denotó durante del desarrollo del G77 en la Fexpo, donde muchos incautos, se indignaban porque el gobierno le había cambiado el nombre a los salones de “nuestra feria”, es decir ¿desde cuándo se nos ha hecho creer el cuento, de que ese espacio privado perteneciente a los empresarios de la CAINCO, en el cual hay que pagar hasta por entrar al baño cuando hay feria, pertenece al pueblo cruceño? Esto también denota, lo poco que se ha invertido en el desarrollo cultural, en la adopción de símbolos de un carácter más inclusivo, en el arte, en la investigación socio-histórica, actividades cuyo producto llega al común de la población cruceña a cuenta gotas, pero sería mucho peor, sino fuera por el esfuerzo quijotesco de algunas pocas personas e instituciones valiosísimas. ¿Por ejemplo a alguna autoridad local se le ocurrió la sencilla idea de empezar a buscar a apoyo para financiar la producción del excelente programa de educación ciudadana llamado “Dos Semanas”? Absolutamente a ninguno, hemos caído en el error del determinismo desarrollista, basado solo en factores económicos, en la acumulación monetaria, que ha relegando el desarrollo cualitativo de la educación y cultura cruceña. Lamentablemente el estado de dormitación subjetiva en el cual se encuentra sumergida la sociedad cruceña, está siendo capitalizado por el alcalde Percy Fernández y su entorno parasitario, sospechado de corrupción, ocupación de terrenos, contratos irregulares, etc., felizmente apuntalado por su última alianza con el masismo, que en su esfuerzo de alcanzar un triunfo político departamental en las próximas elecciones, se aseguró el servilismo del aparato burocrático de la alcaldía cruceña y sus influencias locales. Hay que recalcar que el estado de dormitación subjetiva regional, no solo está beneficiando a los protagonistas de esta alianza, sino que de parte de la misma, existe un esfuerzo decidido por sostenerla el mayor tiempo posible, implementando la aplanadora lógica de la arga-mas-a, cuyo opio es el asfalto y los armatostes de cemento, mal terminados y sin señalización, elaborados por algunas constructoras de misteriosos privilegios, gastándose cerca de 50 mil bolivianos en cada show de inauguración en las obras que entregan como “regalos” del alcalde. En relación al Comité Cívico, que era una de las instituciones locales con mayor poder de convocatoria, en la actualidad se ha convertido en una entidad caduca, estigmatizada por el privilegio de los logios y empresarios acaudalados que se perpetuán en su liderazgo, incapaces de generar a estas alturas de nuestra historia, algún atisbo de simpatía por parte de la clase media-baja de la ciudad, menos aún por los migrantes, clases que a su vez, tienen ese cargo vedado, al igual que las mujeres, sin importar su condición. ¿Me pregunto si por ejemplo en las ciudadelas cruceñas, conocerán el nombre del actual presidente del Comité? Sin hacer el más mínimo esfuerzo por construir un proyecto político regional novedoso, inclusivo, con proyección nacional, los partidos políticos locales y sus líderes hiper-reciclado, trataron de consolidar alguna alianza desesperada, cuya máxima se resumió en arrebatarle algunos votos al MAS, temiendo que si el gobierno llega a obtener dos tercios en las próximas elecciones, transformará la constitución para implantar la reelección indefinida del presidente. Finalmente los tradicionales desencuentros por un futuro cuoteo de poder, llevaron a que no se contrete la tan afamada alianza. Rubén Costas, Oscar Ortiz, Germán Antelo, los mismos rostros de siempre, la misma gente que desde años se encuentra aferrada a los centros de poder local, a la gobernación, las cooperativas, las logias, etc., sinceramente aburren. De parte de los políticos jóvenes el panorama es muy poco alentador, desde ningún frente se avizoran liderazgos rebeldes y propositivos, solo gente conformista de pocas luces, que deja pasar oportunidades políticas importantes, para sumergirse en los circuitos de la politiquería y la demagogia, mientras se aseguran buenas pegas bajo la protección de alguna estructura política vieja, como Vladimir Peña, Rafael López o el diputado Tomás Monasterio, quien se desvive en sus críticas al gobierno, mientras en relación a las tremendas irregularidades de la alcaldía, donde tiene puestos sus intereses no dice absolutamente nada. Los liderazgos indígenas sencillamente no existen, tanto para la oposición como para el gobierno, son solo un adorno discursivo, puesto que está estrictamente prohibido, que cualquier indígena así sea del MAS, le haga un mínimo de sombra de su majestad Evo Morales, y cuando surgió una líder indígena como Justa Cabrera, lo primero que hicieron los políticos locales, fue darle una pegucha para truncar su ascenso. La muerte sin mayores repercusiones del Mburuvicha Bonifacio Barrientos, es otra buena muestra de la falacia de lo plurinacional. Finalmente en los términos de uno de los principales pensadores del populismo, Ernesto Laclau, al que prácticamente nadie se molesta en leer, podría decirse que el gobierno está terminado de construir su proyecto hegemónico en Santa Cruz, basándose en el anudamiento de varias alianzas multisectoriales y policlasistas. La última oda que el vice-rector de la UAGRM, el señor Oswaldo Ulloa le dedicó al presidente Morales en un artículo del “El Deber”, reafirma el servilismo y pasividad ideológica en la que se encuentra sumergida la universidad pública desde hace años, tanto en relación a la sociedad, como a las enfermizas situaciones que se repiten en su interior. Cosa similar ocurre con la UDABOL, acérrima y violenta opositora del gobierno de Evo Morales, ahora misteriosamente devenida a entregadora de títulos “doctor honoris causa”, que solapan sus constantes irregularidades internas. Aparte de la alcaldía, el gobierno también tranzó con el empresariado local al que se cansó de tildar como separatista, compró varios medios de comunicación o en su defecto, hizo pactos con algunos. Años atrás engrosó sus filas con lo peor de los extremistas locales, incorporando a sus críticos más arrofaldados, a los violentos integrantes de las barras bravas de Oriente Petrolero y los pateadores de campesinos de la “Unión Juvenil Cruceñista”. Ante todo esto, la opinión pública lanzó el grito al cielo, deshaciéndose en críticas ante lo discordante o poco ético de estas alianzas, mientras que al gobierno no se le movía un pelo, ya que para Laclau, pragmático total, que analizaba la política sin moralizar, la ética solo es una categoría burguesa, cuando se trata de afianzar alianzas que consoliden un proyecto hegemónico. Dentro de esta misma lógica, no es extraño suponer porque no se ha desarrollado el proyecto siderúrgico del Mutún, porque no se aprovechan las riquezas mineralógicas de la Chiquitanía, o porque finalmente no se desarrolla el potencial hidrográfico de Puerto Busch, única salida al mar que por el momento puede tener Bolivia. Pero el gobierno no está loco para ceder parte del poder central hacia el oriente y fortalecer a la oligarquía cruceña. Mientras no tenga controlada políticamente a la ciudad, difícilmente generará un cambio estructural en el aparato productivo cruceño, si es que algún día lo hace, porque como lo sostuvo García Linera en una entrevista internacional, al gobierno no le interesa incrementar el desarrollo productivo de Santa Cruz, En estos momentos de desorientación y crisis identitaria local, propongo un retorno a nuestros referentes, pero desde una perspectiva histórica diferente y crítica, que disienta de la historia que nos vendieron desde los centros de poder y sus pensadores acomodadizos como verdades indiscutibles, recuperando la obra y acciones de muchos cruceños notables olvidados. Propongo un retorno a los patriotas de la independencia, a los esclavos negros sublevados en el Tao , a Andrés Ibañez, Apiaguaiqui Tumpa, el escuadrón Velazco, Ignacia Zeballos, Cástulo Chavez, Germán Busch, Dionisio Foianini, Froilán Calleja, Edmundo Roca, los excombatientes del LEC, los hermanos Vásquez Machicado, Adolfo Román hijo, Rómulo Gómez, Daniel Pérez Velazco, Virgilio Vega, Elffy Albrecht , Melchor Pinto, Lorgio Vaca, Percy Boland, Omar Chávez Ortiz, los jóvenes y catedráticos de la revolución universitaria, Rolando Aguilera Parejas, hasta el mismo Percy Fernández de sus mejores épocas, entre tantos otros notables que no alcanzo a mencionar. Por el momento ya existen focos de disconformidad y rebeldía, que son transformados en acciones productivas, desde centros culturales como el de San Isidro, desde el activismo por los derechos humanos, desde las Mujeres Creando, desde la plazuela Calleja, desde la prensa crítica e investigativa que no se calla, desde la gente de la Revolución Jigote. Pero también es imperativo que esto crezca, impulsando a que los jóvenes de clase media-baja de nuestra ciudad, intelectuales y pensadores, al igual que las mujeres distraídas en las chácharas de promociones Gloria reaccionen, articulando a los principales anillos de la ciudad, con los habitantes de las ciudadelas, la periferia y los inmigrantes del interior, en un proyecto político alternativo, que sacuda a Santa Cruz de su modorra y preocupe a las viejas estructuras de poder regionales y centrales. Los habitantes de Santa Cruz la Sierra, no pueden seguir dándose el lujo de estar a la cómoda espera de un caudillo salvador, esos tiempos ya pasaron, y si no se empieza a trabajar ya, para construir un tejido multitudinario, nuestro ciudad conducida por los politiqueros acomodadizos de siempre, se convertirá en el último bastión del masismo, cuando el mismo se encuentre en indeclinable desgaste, como pasó en la última etapa neoliberalista del MNR.