Otro ex jefe militar confirmó ante el Supremo de Brasil los planes golpistas de Jair Bolsonaro


Carlos de Almeida Baptista testificó que el ex presidente presionó para sembrar dudas sobre la legitimidad de las elecciones de 2022.

Carlos de Almeida Baptista Junior

Carlos de Almeida Baptista Junior (REUTERS/Ueslei Marcelino)

 



Fuente: infobae.com

Este miércoles, Carlos de Almeida Baptista, antiguo comandante de la Fuerza Aérea de Brasil, declaró ante la Corte Suprema señalando al ex presidente Jair Bolsonaro por haberse involucrado en presiones para poner en duda la legitimidad de las elecciones de octubre de 2022. Baptista afirmó que Bolsonaro fue informado por altos mandos de que no había indicios de fraude electoral, información que forma parte de su testimonio sobre los episodios de violencia que culminaron en los ataques a instituciones brasileñas en enero de 2023.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Según Baptista, Bolsonaro intentó influir en un informe destinado a ratificar la transparencia del sistema electoral brasileño. “Sí, oí que sí, seguramente otros testigos pueden hablar con más precisión”, indicó Baptista, refiriéndose a las maniobras de Bolsonaro para desacreditar el proceso electoral.

Baptista detalló que, en diciembre de 2022, Bolsonaro presentó a los jefes militares unas “propuestas” que atentaban contra el régimen democrático, entre ellas, declarar un estado de sitio para impedir que Lula asumiese el cargo. Tanto él como el general Marco Antonio Freire Gomes, ex comandante del Ejército, rechazaron estas propuestas, advirtiendo a Bolsonaro sobre las severas consecuencias legales de sus planes.

Este testimonio es uno de varios que la justicia ha comenzado a escuchar desde el lunes, en relación con la implicación de Bolsonaro en lo que se describe como una de las crisis políticas más significativas de los últimos años en Brasil. La Fiscalía presentó denuncias contra Bolsonaro y alrededor de treinta personas de su entorno, acusados de encabezar una organización criminal que supuestamente barajó incluso el asesinato del presidente Luiz Inácio Lula da Silva para evitar que asumiera el poder.

Jair Bolsonaro (REUTERS/Adriano Machado)

Jair Bolsonaro (REUTERS/Adriano Machado)

Entre los acusados destacan figuras cercanas a Bolsonaro, como su ex ‘mano derecha’, el coronel Mauro Cid, quien ahora colabora con la justicia bajo un acuerdo; el ex director de Inteligencia Alexandre Ramagem; los exministros de Defensa Paulo Sérgio Nogueira y de Justicia Anderson Torres; y el excomandante de la Marina, almirante Almir Garnier.

El único jefe militar que no se opuso abiertamente a los planes golpistas habría sido el almirante Almir Garnier, según testificó Baptista. Este relato corrobora las declaraciones del general Freire Gomes sobre una reunión en la cual Bolsonaro contempló la posibilidad de interrumpir la investidura de Lula tras las elecciones de 2022. Freire Gomes expresó la necesidad de evaluar las consecuencias de tales acciones y garantizó que las Fuerzas Armadas no apoyarían a Bolsonaro si continuaba con estas intenciones, advirtiéndole que podría enfrentar consecuencias legales.

El Ministerio Público sostiene que la conspiración de Bolsonaro contra el proceso electoral comenzó tras su derrota frente a Lula en su intento de reelección. Esta trama culminó en el violento asalto a las sedes del Supremo, el Congreso y la Presidencia el 8 de enero de 2023, por adeptos de Bolsonaro que buscaban provocar una intervención militar para derrocar al nuevo gobierno de Lula.

Las denuncias de la Fiscalía incluyen una supuesta trama para asesinar a Lula, al vicepresidente Geraldo Alckmin, y al magistrado del Supremo Alexandre de Moraes, quien era jefe del Tribunal Electoral en ese momento. Estas denuncias fueron aceptadas este martes por la Primera Sala del Supremo, que ha imputado a nueve militares y a un agente de la Policía Federal. La trama golpista suma ahora más de treinta acusados, entre ellos Jair Bolsonaro.