Cocaleros de Yungas, molestos por privilegios de hoja chapareña; se sienten discriminados por el Gobierno

Adepcoca dice que desconocía la Resolución 089, que obliga a los detallistas a comprar la coca cochabambina.

Descontento. La resolución administrativa del Viceministerio de la Coca obliga a los vendedores al detalle a adquirir mensualmente cinco paquetes de la hoja del Chapare, bajo amenaza de sancionarlos con la pérdida de la licencia de comercialización. Ángel Miranda, vicepresidente de Adepcoca, dijo que su sector se siente discriminado por el Gobierno, al que el senador cocalero Lino Willca (MAS) le pidió “respeto” para los productores de La Paz.

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Yungas: un productor muestra la calidad de su cosecha en el mercado de Adepcoca, en La Paz

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La Prensa

Cocaleros de Yungas se sienten discriminados por el Gobierno

ADEPCOCA NO CONOCÍA RESOLUCIÓN QUE OBLIGA A COMPRAR EL PRODUCTO EN SACABA

Representantes de las regionales de Adepcoca se reunirán este lunes en La Paz.

Los productores de coca de los Yungas se sienten discriminados por lo que entienden es un trato preferencial, que éste y los anteriores gobiernos han dispensado, a los cocaleros del trópico cochabambino.

Ángel Miranda, vicepresidente de la Asociación Departamental de Productores de Hoja de Coca de La Paz (Adepcoca), expresó la preocupación de su sector y el senador masista Lino Villca exigió que el Ejecutivo “respete” a los cultivadores asentados en la zona yungueña.

Este lunes se realizará, en La Paz, un ampliado de todas las regionales de Adepcoca.

El encuentro será dirigido por los presidentes y dirigentes de las regionales de Coripata, Chulumani, Inquisivi, Chamaca, La Asunta, Irupana, Coroico, Arapata, Huancané, Chicaloma y Milluhuaya.

Miranda reveló que Adepcoca no conocía la Resolución Administrativa 089 del Viceministerio de la Coca, que obliga a los vendedores al detalle a adquirir mensualmente cinco paquetes, equivalentes a 500 libras, de la hoja que se produce en el Chapare, bajo sanción, para quienes no la acaten, de perder la licencia de comercialización.

Esa norma, aprobada el 14 de junio de 2007, avala un convenio logrado el 30 de mayo de ese año en Sacaba por representantes de la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin), las seis federaciones del trópico cochabambino y de los detallistas.

Adepcoca no fue invitada a participar en esa reunión. Según Miranda, “nos discriminan. No puedo decir más. Adepcoca está analizando el tema y el martes ofreceremos una conferencia de prensa en la que daremos a conocer nuestra posición oficial”.

Adepcoca, que aglutina a unos 33.000 cocaleros de Nor Yungas, Sud Yungas e Inquisivi, es representada en el Congreso por Lino Villca.

“Nosotros —afirmó el legislador— exigimos respeto y ecuanimidad al Gobierno”.

El parlamentario lamentó el “tratamiento diferenciado” que se da a Yungas y Chapare, a pesar de que “la coca del trópico cochabambino es ilegal y es tan poco apreciada, y que en esa región se consume la yungueña”.

Actualmente se realiza el estudio integral del uso y consumo tradicional de la hoja de coca en hogares bolivianos. “Estamos derrotados de entrada, porque ese trabajo se levanta en 29 comunidades del trópico y solamente en cinco yungueñas”.

Dos de los tres principales cargos públicos del área son ocupados por representantes de los cocaleros de Cochabamba. Se trata de Felipe Cáceres, viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, y Luis Cutipa, principal responsable de Digcoin, en tanto que el Viceministerio de la Coca y Desarrollo Integral es dirigido por un yungueño: Gerónimo Meneses.

Además, según Villca, el desarrollo alternativo es prácticamente inexistente en Yungas, mientras que en Cochabamba se erige ya una planta para industrializar la hoja de coca.

Los dirigentes de Adepcoca reaccionaron con malestar y preocupación por las decisiones tomadas por el Gobierno para forzar a los consumidores habituales de la coca a acullicar o tomar mates con el producto del Chapare. “Esas hojas no parecen de coca, sino de un cafeto. Son grandes y tienen un sabor amargo”.

En oficinas de la entidad se muestran algunos ejemplares de la producción chapareña, que sirven para respaldar las afirmaciones de sus dirigentes para descalificar la producción que califican como ilegal.

Los integrantes del directorio de Adepcoca se reunieron ayer por la tarde en sus oficinas para considerar este caso, pues creen que la mencionada resolución les causa perjuicios y genera competencia.

La Prensa intentó conocer ayer la opinión del viceministro Meneses, pero John Cornejo, responsable del área de Comunicación, informó que éste se encontraba en Santa Cruz y que probablemente el lunes dará a conocer la posición oficial de esa cartera.

Hasta entonces esa dependencia estatal no emitirá un pronunciamiento sobre la venta al detalle ni sobre la reacción de los dirigentes de Adepcoca.

Control es de los detallistas

Dos acuerdos suscritos, el 5 de febrero y el 27 de mayo de este año, por las dos federaciones nacionales de detallistas de coca con autoridades de la Dirección General de la Hoja de Coca e Industrialización (Digcoin) suprimieron el requisito de que las hojas de ruta lleven sellos de esta entidad en los puntos de destino y determinaron que es suficiente la certificación de la correspondiente asociación regional de comerciantes.

El dirigente de los vendedores al detalle Martín Cusi explicó que hay puntos muy alejados de los principales centros urbanos del país, tales como Bolpebra, en el departamento de Pando, y otros que no recordó, donde por diferentes razones Digcoin no cuenta con personal propio.

En esos sitios, Digcoin permite que sean los mismos comerciantes quienes certifiquen que el 100 por ciento del producto declarado llegó a ese punto, no se desvió y que fue puesto a la venta para los consumidores individuales o familiares.

En aquellos lugares donde hay funcionarios de Digcoin, las correspondientes hojas de ruta llevan los sellos de esa repartición estatal y de los detallistas, en cumplimiento del control social que los mismos sectores ejercen sobre sus afiliados.

De igual manera, se suprimieron los sellos de control en la Terminal de Buses de la ciudad de La Paz.

Datos

Los dirigentes de Adepcoca rechazan la resolución que obliga a comprar hoja del Chapare.

Los productores de la zona tradicional se reunirán en La Paz para analizar el caso.

Los yungueños aseguran que sus cosechas son las únicas aptas para el acullico.

LINO VILLCA, SENADOR DEL MAS

“Nosotros perdemos de entrada”

—¿Qué opina de la resolución que obliga a los detallistas a comprar coca del Chapare?

—Es un tema muy delicado. Siempre los Yungas y el trópico de Cochabamba han recibido un tratamiento diferente, a pesar de que la coca yungueña tiene realmente un contenido de identidad cultural y la hoja del Chapare es ilegal, según la Ley 1008.

—¿Cuáles son los hechos concretos de discriminación a su sector?

—Nosotros perdemos de entrada, porque la encuesta de consumo tradicional se levanta en 29 comunidades del trópico y solamente en cinco yungueñas. El desarrollo alternativo en Yungas no existe. El Chapare se beneficiará con la carretera bioceánica que será asfaltada, mientras que nosotros tenemos 15 puntos de colapso en la carretera Unduavi-Chulumani. Digcoin, al ser manejada por chapareños, es juez y parte”.

—¿Cuánta coca debe haber en el territorio nacional?

—La propuesta del Gobierno nacional de autorizar 20.000 hectáreas de cocales tiende a legalizar la producción del Chapare. Exigimos que el Ejecutivo nos respete.

—Y el narcotráfico…

—Ni los anteriores gobiernos, ni el actual entraron a los Yungas para erradicar, porque no hubo ni hay motivo. El narcotráfico está en Cochabamba y en Santa Cruz. En los Yungas no se encontró cocaína ni laboratorios, pero sí en esas regiones. Eso lo pueden ver todos…

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