Jimmy Ortiz Saucedo
Noticia: A la mujer embarazada le quitaron la vida por un monedero (El Deber 25-07-14).- La Fiscalía ha informado que la joven madre falleció luego de que un antisocial, en presencia de un niño de siete años, le disparó en la cabeza para robarle un monedero con poco dinero. Los médicos lograron salvar al bebé.
Comentario: Esta trágica noticia me avergüenza como Cruceño, hiere mi conciencia de ser humano y de cristiano.
¿Cómo es posible que la delincuencia llegue a estos extremos? ¿Cómo es posible llegar a cometer semejante acto de salvajismo? ¿Son hombres o bestias? ¿Qué pasa con los nuevos Cruceños? ¿Qué tipo de sociedad estamos creando?
¡Poco queda de la Amable Ciudad Vieja, de Raúl Otero Reiche! ¡Poco queda de la amada ciudad donde nací! ¡Poco queda de la Tierra Camba segura y fraterna de mi infancia y juventud! La ciudad de las medias aguas abiertas y la sonrisa franca.
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Todo en la vida tiene sus límites, incluso las maldades de la "gente", y este es uno de ellos. Asesinar una mujer embarazada, por robarle una chauchera, es pasarse de la raya. La policía, la justicia y la sociedad, tienen que reaccionar con toda su fuerza. Este tipo de barbarie se tiene que cortar de raíz, con una condena ejemplarizadora.
El niño que sobrevivió a tan horrendo crimen, se debate entre la vida y la muerte, en la unidad de terapia intensiva. Ruego a La Divina Providencia por su vida, que será la continuación de la vida de Sandra Ramírez, la infortunada madre.
Debo reconocer que esperaba una mayor reacción de las autoridades y la ciudadanía. Me decepcionó la tibieza y hasta su indiferencia. Nos hemos acostumbrado a la muerte, a la inseguridad ciudadana, al narcotráfico y sus sicarios, que ya nada nos espanta. Lo poco espanta y lo mucho amansa. ¿Nos hemos amansado? ¿Somos una sociedad indiferente ante la tragedia humana que nos rodea?
Expresa El Deber del 27-07-14: "Bebé lucha por su vida en una clínica. Familiares de la joven asesinada piden apoyo para pagar las cuentas. Sentada en la clínica Incor, Alicia Holguín no termina de llorar la pérdida de su hija, y suelta más lágrimas para pedir ayuda para su nieto, el bebé sietemesino que fue rescatado del vientre de Sandra Ramírez Holguín; la joven embarazada de 29 años que fue asaltada el pasado miércoles y murió tras recibir un balazo en la cabeza.
Con la voz quebradiza, ella dice que a la familia le es imposible pagar las cuentas médicas que hasta ayer ascendían a Bs 19.000 solo en gastos de internación, sin contar los honorarios de los galenos y los medicamentos".
Pido a mi pueblo reaccionar, no dejemos a esta genta sola, fieles a nuestra tradición histórica y cristiana. Pido a las autoridades y líderes regionales involucrase en este caso, socorramos a este niño.
Este niño tiene que vivir para que siga habiendo esperanzas de un futuro mejor, para él y para todos nosotros. Y no solo eso, como sociedad debemos ayudarlo en su niñez y en su juventud, para hacer de él un hombre de bien, pese a la ausencia irreparable de Sandra.
"El bebé tiene nombre, se llama Ario James; lo decidió su difunta madre hace una semana cuando esperaba amorosamente su llegada", según declaró el padre.
Confío en la reacción de mi pueblo. Confío en el alma Camba de esta tierra que lleva por nombre La Cruz de Cristo. Confío en la solidaridad que siempre nos acompañó desde 1.561. Ario tiene que vivir.