El defensor central fue amonestado en Venezuela, lo que significó que quedara suspendido para el partido frente a Chile. “Estoy con el grupo”, dijo a El Deber Sports.
Fuente: eldeber.com.bo
Luis Haquin, capitán de la selección boliviana, no podrá estar en el campo de juego este martes ante Chile debido a una suspensión por acumulación de tarjetas amarillas. A pesar de esta baja, el defensor tomó la decisión de permanecer en La Paz para acompañar y alentar a sus compañeros, tanto en la concentración como durante el partido en el estadio Municipal de Villa Ingenio, en El Alto (16:00).
El zaguero central, que actualmente milita en el Mushuc Runa de Ecuador, fue amonestado el pasado viernes en el encuentro frente a Venezuela en Maturín, lo que significó su segunda tarjeta amarilla consecutiva. Esta situación, según la normativa de la FIFA en las Eliminatorias Sudamericanas, lo obliga a cumplir un partido de suspensión.
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Haquin, lejos de apartarse del grupo tras la sanción, optó por mantenerse junto a la selección y ofrecer su respaldo desde fuera del campo. “Sí, me voy a quedar con el grupo”, declaró el defensor a El Deber Sports, confirmando su compromiso con el plantel en un momento crucial del certamen clasificatorio.
La determinación del defensor refleja su liderazgo dentro del equipo, no solo en el campo, sino también desde el plano emocional y anímico. Su presencia será un respaldo para los jugadores más jóvenes y una señal de unidad en la interna de la Verde.
En las últimas horas, Haquin también fue protagonista de un momento que se viralizó en redes sociales, donde se lo vio defendiendo a su compañero Diego Arroyo. El joven defensor boliviano fue increpado por Salomón Rondón, tras ganarle una disputa de balón durante el partido ante la Vinotinto. La reacción desmedida del delantero venezolano generó tensión en el campo.
Haquin intervino de inmediato para respaldar a Arroyo, encarándose con el experimentado atacante venezolano. El árbitro del encuentro intervino en la disputa y terminó amonestando a ambos jugadores. Esa acción fue clave en la sanción que hoy margina al capitán del duelo frente a Chile, aunque su compromiso con el grupo se mantiene intacto.