Luego de varios días sin dormir, pobladores de Llallagua despertaron este viernes respirando algo de tranquilidad luego de que fuerzas militares llegaran anoche a la localidad minera para reforzar la labor policial, mientras se reporta desde el lugar que el bloqueo en la ruta Potosí- Sucre fue levantado por la madrugada de hoy. Además, la principal vía desde Llallagua hacia Oruro está totalmente despejada.
Patrullas de militares y policiales vigilan la región con el fin de evitar que los grupos armados vuelvan a sembrar el terror en esta región.
Para este viernes, a las ocho de la mañana, la población ha convocado a un “ampliado” en la plaza del Minero, en el que tratarán el pedido de renuncia del alcalde de Llallagua y de todos los concejales, por su deficiente manejo de la crisis.
“Cerca a la una de la madrugada de hoy se levantó el bloqueo en la carretera Potosí –Sucre-Betanzos, los pocos bloqueadores que pernoctaron allí señalaron que hubo discusiones porque no todas las comunidades participaban en estas movilizaciones», escribió en sus redes sociales el periodista Jorge Peñaranda, citado por el medio El Potosí.
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En tanto, desde la Terminal Interdepartamental de Buses de Potosí, no se ha informado de la regularización de viajes desde Potosí a Sucre, hasta las siete de la mañana de este viernes. No han emitido autorización para viajar de Potosí a Sucre y tampoco a Oruro.
Pese al clima casi normal, aún hay tensión en la población de este distrito minero, pues aún sufre de desabastecimiento de alimentos e insumos médicos.
Anoche, la población homenajeó a las víctimas con un minuto de silencio, con la presencia del ministro de Gobierno y de jefes policiales.
Un contingente de aproximadamente 500 policías y casi un millar de militares terminó de desbloquear la ruta Oruro-Llallagua-Potosí la noche de este jueves, en un operativo liderado por el ministro de Gobierno, Roberto Ríos, y el Comandante de la Policía.
La caravana, compuesta por más de 60 vehículos que incluían carros de asalto “Z” y camiones, avanzó desde Huanuni sin encontrar resistencia. Según constató El Deber, los bloqueadores afines al «evismo» desaparecieron del trayecto, donde una pala mecánica se encargó de retirar las piedras abandonadas en la vía.
Al ingresar a Llallagua, las fuerzas del orden fueron recibidas con júbilo por la población, que salió a las calles con aplausos, pañuelos blancos y banderas bolivianas en señal de apoyo. “¡Gracias, los recibimos con cariño!”, expresó una vecina, mientras otros abrazaban a las autoridades.
Los conflictos entre los grupos armados que apoyan la candidatura de Evo Morales ya se han cobrado la vida de cuatro policías y un civil. Tres de los oficiales perdieron la vida en Llallagua, donde además se reportaron más de 80 heridos.
