La academia, a través de un video promocional, empezó a calentar la previa del partido frente a Oriente Petrolero, que solo tendrá hinchas celestes por cuestiones de aforo y seguridad.
Fuente: eldeber.com.bo
Blooming comenzó a calentar el ambiente del clásico cruceño ante Oriente Petrolero con un video promocional publicado en sus redes sociales, que rápidamente generó expectativa entre los hinchas. El duelo está programado para el domingo 22 de junio a las 17:15, en una edición especial del clásico que tendrá un condimento diferente.
El partido se disputará en el estadio Gilberto Parada de Montero, un escenario poco habitual para este tipo de encuentros, y contará con una medida particular: solo podrán asistir los hinchas de Blooming, que oficiará de local, como parte de una determinación de seguridad. Se estima que cerca de 13.000 personas estarán presentes en las graderías para alentar a la academia.
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A diferencia de ediciones anteriores, esta vez el clásico no se podrá jugar en el estadio Ramón Tahuichi Aguilera, tradicional sede de los enfrentamientos entre celestes y albiverdes, debido a que se encuentra cerrado por trabajos de refacción con miras a la final de la Copa Sudamericana 2025, que se disputará en Santa Cruz.
Esta será la primera vez que un clásico cruceño se juegue exclusivamente con la hinchada de un solo equipo, lo que marca un hecho histórico dentro de uno de los duelos más pasionales del fútbol boliviano. La medida busca evitar incidentes y garantizar el normal desarrollo del compromiso.
La campaña de Blooming en redes sociales ha tenido una gran repercusión entre sus seguidores, quienes ya se preparan para llenar el estadio y convertir a Montero en una auténtica marea celeste. El club apuesta por una fiesta propia, con cánticos, banderas y el aliento incondicional de su gente.
En un contexto atípico para el clásico, Blooming buscará sacar ventaja del respaldo exclusivo de su hinchada y sumar tres puntos valiosos. El duelo promete ser intenso, con emociones tanto dentro como fuera del campo, en un espectáculo que, aunque diferente, no perderá su esencia.