El presidente ruso afirmó que «hay un gran y creciente potencial de conflicto en el mundo» y mencionó la guerra entre Israel e Irán, su aliado, así como la guerra en Ucrania.
Fuente: Globo G1
Al ser preguntado sobre el conflicto directo entre Israel e Irán, el presidente ruso, Vladimir Putin, expresó su preocupación por la posibilidad de que el mundo se encaminara hacia una Tercera Guerra Mundial. Rusia es aliada de Irán.
En un foro económico celebrado en San Petersburgo el viernes (20), Putin mencionó la guerra en Ucrania, que comenzó tras la invasión rusa en febrero de 2022, y el conflicto directo entre Israel e Irán. Vea el vídeo arriba.
El líder ruso dijo que estaba preocupado por lo que estaba sucediendo alrededor de las instalaciones nucleares en Irán, donde expertos rusos están construyendo dos nuevos reactores nucleares para Teherán.
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Es preocupante. Hablo sin ironía, sin bromear. Claro que hay un gran potencial de conflicto, está creciendo, está ante nuestros ojos y nos afecta directamente, dijo Putin.
Putin también lidera la invasión de Ucrania por parte de sus tropas, que cumplió su tercer aniversario en febrero. Y este año, las fricciones con la OTAN —integrada por países de la Unión Europea, Estados Unidos y el Reino Unido— han suscitado temores de que la guerra pueda extenderse más allá de las fronteras ucranianas.
Siguiendo con el tema de la guerra en Ucrania, Putin lanzó nuevas amenazas y envió señales contradictorias: afirmó que podría apoderarse de nuevos territorios, como la ciudad de Sumy, en el noreste de Ucrania, y afirmó que los pueblos ruso y ucraniano «son uno» y que, en este sentido, «toda Ucrania es nuestra». El líder ruso también afirmó que «no busca la rendición de su rival», sino el reconocimiento de aproximadamente el 20% del territorio ucraniano que sus tropas controlan actualmente.
Las declaraciones de Putin sobre el pueblo ucraniano recuerdan a un ensayo que publicó en 2021, en el que argumentó que Ucrania no era un país soberano. Sin embargo, el viernes, el líder ruso afirmó que nunca había cuestionado el derecho de los ucranianos a la soberanía.