A medida que se acercan los comicios generales, los postulantes visitan diferentes regiones de Bolivia en busca de votos.
Fuente: El Diario / La Paz
Cuando faltan 25 días para las elecciones generales, los candidatos presidenciales intensifican su campaña. Samuel Doria Medina, de la alianza Unidad, ayer informó que visita el trópico cochabambino, mientras Manfred Reyes Villa llegó a Achacachi, en el altiplano paceño. Eduardo Del Castillo, presidenciable del MAS, enfrentó una pedrada en Caranavi, donde suspendió su acto político.
A medida que se acercan los comicios generales, los postulantes visitan diferentes localidades en busca de votos.
“Llegué a Villa Tunari, trayendo un mensaje para los productores de fruta. Es posible otro camino, uno de emprendimiento, producción, reencuentro y prosperidad”, escribió en sus cuentas de redes sociales Doria Medina.
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El candidato de la alianza Unidad acompañó su mensaje con una fotografía en el ingreso a la localidad de Villa Tunari, en la provincia Chapare del departamento de Cochabamba, zona que es considerada bastión de Evo Morales.
En días pasados, seguidores de Morales advirtieron que impedirían la realización de campañas proselitistas en el trópico de Cochabamba, debido a que Morales no figura como candidato presidencial.
Por su lado, Reyes Villa visitó ayer la localidad de Achacachi, en el altiplano paceño, zona dominada por los denominados “ponchos rojos”.
Ramiro Mollinedo, dirigente departamental de APB Súmate de La Paz, aseguró que Reyes Villa fue llevado en hombros en esa localidad.
Dijo que la gente pedía cambio a Reyes Villa, en el acto proselitista con miras a los comicios generales previstos para el 17 de agosto próximo.
El dirigente de APB Súmate expresó su alegría y satisfacción por el recibimiento de los pobladores de Achacachi.
Una situación distinta y violenta le tocó vivir al presidenciable oficialista Eduardo del Castillo, quien enfrentó una pedrada en su acto político en Caranavi.
Sectores presuntamente evistas atacaron la concentración política de Del Castillo, quien junto a los arcistas se quedaron con la sigla del Movimiento al Socialismo (MAS).