Santa Cruz. Permanecieron 12 días en la propiedad Puesto Nuevo, propiedad de un concejal de Ascensión de Guarayos. Durante la toma, hirieron a uno de los trabajadores
Fuente: eldeber.com.bo
La tarde noche del lunes, los aproximadamente 30 integrantes que tomaron por la fuerza la propiedad Puesto Nuevo decidieron salir de la misma. Estuvieron 12 días en la propiedad. Al abandonarla, quemaron algunas construcciones.
«Yo creo que los ocupantes, más que por la intervención de las autoridades puestas por ley, cómo la policía, Fiscalía o el INRA, abandonaron la propiedad por la presión mediática, puesto que, tanto los medios de comunicación, como las redes sociales, pusieron al descubierto sus fechorías ante la sociedad» expresó Filemón Mamani, propietario del predio. Apunta a un grupo de interculturales como los responsables del avasallamiento de a propiedad que está a 23 kilómetros de Ascensión, carretera a La Chonta.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Tras conocerse la retirada, y al no existir riesgo de que se produzca nuevos hechos de violencia, como había ocurrido al momento de la toma, la mañana de este martes, ingresó una comisión integrada por el Juez indígena Walter Mercado, el Cacique Mayor, Ascencio Arapuca, el diputado electo por la Circunscripción Especial, Wilson Añez, entre otros dirigentes. Una vez en el lugar hicieron una evaluación de los daños ocasionados en dicho predio.
«Me sentí impotente al ver mi predio, mis animales y mis pertenencias, literalmente saqueadas y destruidas» refirió Mamani a El DEBER en Guarayos.
Indicó que, a primera vista, le faltan 10 vacas, sus animales menores (100 gallinas y 50 patos) desaparecieron, dos de las tres casas quemadas. Igual destino tuvieron dos motocicletas. Varias pertenencias como una motosierra, una motobomba, herramientas agrícolas e insumos veterinarios, por valor de 20 mil dólares, también desaparecieron, denunció el afectado. Mamani indicó que está haciendo la denuncia ante la Fiscalía por los delitos de avasallamiento de tierras, robo, abigeato e incendios.
De su lado el juez indígena Walter Mercado, calificó los hechos algo «bárbaro». Lamentó que «parece que estuviéramos en tierra de nadie, sin Dios ni ley». Relató que al saber del ingreso a la propiedad de diversas autoridades locales, los avasalladores tumbaron más de una docena de árboles en el camino, para después retirarse, pero a pesar de los obstáculos llegaron al lugar donde pudieron evidenciar destrozos a la propiedad privada, a demás de incendio forestal.
La autoridad indicó que, una vez colectadas todas las evidencias, iniciará un proceso a los responsables.