Ex jefe del FBI James Comey se declaró no culpable en el caso impulsado por Trump


El ex funcionario, destituido por el presidente en 2017, enfrenta acusaciones de haber mentido al Congreso hace cinco años. “No tengo miedo”, dijo

 

ARCHIVO – El exdirector del

ARCHIVO – El exdirector del FBI, James Comey, acude a testificar bajo citación ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes en el Capitolio, Washington, el 7 de diciembre de 2018. (AP Foto/J. Scott Applewhite, Archivo)



 

(Con información de AFP y AP)

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Fuente: infobae.com

El ex director del FBI, James Comey se declaró no culpable este miércoles de cargos por obstrucción a una comisión de investigación parlamentaria y falso testimonio ante el Congreso, en un caso que muchos ven como una represalia del presidente Donald Trump.

El abogado de Comey, Patrick Fitzgerald, presentó este miércoles la declaración de no culpable del exjefe del FBI durante una audiencia en un tribunal federal en Alexandria, en las afueras de Washington.

La declaración da inicio a un proceso de disputas legales en el que los abogados defensores seguramente tratarán de que se desestime la acusación antes del juicio, posiblemente argumentando que el caso equivale a un enjuiciamiento selectivo o vengativo.

El juez Michael Nachmanoff fijo el 5 de enero como fecha de inicio del juicio. Nachmanoff fue nombrado para el cargo por la administración demócrata del presidente Joe Biden y es un antiguo defensor federal jefe. Conocido por su preparación metódica y su temperamento tranquilo, el juez y sus antecedentes ya han llamado la atención de Trump, quien se ha burlado de él calificándolo de “juez corrupto nombrado por Joe Biden”.

Varios miembros de la familia Comey llegaron al tribunal el miércoles por la mañana antes de la lectura de cargos, entre ellos su hija Maurene, que fue despedida por el Departamento de Justicia a principios de este año de su cargo de fiscal federal en Manhattan, así como Troy Edwards Jr., yerno de Comey, que minutos después de que Comey fuera acusado renunció a su puesto de fiscal en el Distrito Este de Virginia, la misma oficina que presentó los cargos.

Patrice Failor, esposa del exdirector

Patrice Failor, esposa del exdirector del FBI James Comey, su hija Maurene Comey y Troy Edwards Jr., su yerno, llegan a la lectura de cargos de Comey en Alexandria, Virginia (REUTERS/Kent Nishimura)

Comey fue destituido por Trump en 2017, durante su primer mandato, mientras el FBI investigaba una posible injerencia rusa en la campaña electoral de 2016. Desde entonces, es uno de los objetivos de represalias del mandatario.

En septiembre, el presidente estadounidense reclamó públicamente a su secretaria de Justicia, Pam Bondi, sorprendido por el hecho de que Comey aún no hubiera sido acusado.

Luego obligó a dimitir al fiscal del distrito este de Virginia, Erik Siebert, reprochándole implícitamente su falta de empeño en este caso. Trump lo reemplazó rápidamente con Lindsey Halligan, una asesora de la Casa Blanca, pese a no tener experiencia en la fiscalía.

La secretaria de Justicia de

La secretaria de Justicia de EEUU Pam Bondi. (REUTERS/Jonathan Ernst)

Halligan inició las acciones legales que condujeron a la imputación de Comey, de 64 años, el 25 de septiembre, en relación con su testimonio oral ante el Senado en septiembre de 2020.

Se lo acusa específicamente de negar ante el Senado que autorizó a su adjunto a declarar de forma anónima en medios de comunicación sobre investigaciones delicadas llevadas a cabo por el FBI.

“¡JUSTICIA EN ESTADOS UNIDOS!”, se felicitó Donald Trump en su red Truth Social tras el anuncio de la acusación de Comey, a quien describió como “uno de los peores seres humanos a los que este país ha estado expuesto”.

“No tengo miedo”, respondió Comey rápidamente. “El miedo es el arma de los tiranos”, añadió en su cuenta de Instagram.

“¡JUSTICIA EN ESTADOS UNIDOS!”, se

“¡JUSTICIA EN ESTADOS UNIDOS!”, se felicitó Donald Trump en su red Truth Social tras el anuncio de la acusación de Comey. (Europa Press)

Tras la destitución de Comey, la investigación sobre la injerencia rusa fue confiada al fiscal especial Robert Mueller, que lo reemplazó como director del FBI.

Mueller concluyó que no había pruebas suficientes de colusión entre Moscú y el equipo de Trump, pero señaló una serie de presiones inquietantes ejercidas por el presidente sobre su investigación.

Además de Comey, el Departamento de Justicia también está investigando a otros enemigos del presidente, entre ellos la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y el senador demócrata Adam Schiff, de California.