La CNI manifestó su profunda preocupación por la creciente crisis de desabastecimiento de diésel y gasolina que afecta al sector productivo en todo el país, alertando que esta situación está paralizando progresivamente las operaciones industriales y comprometiendo la seguridad alimentaria nacional.
Fuente: Brújula Digital
La Cámara Nacional de Industrias (CNI) manifestó su profunda preocupación por la creciente crisis de desabastecimiento de diésel y gasolina que afecta al sector productivo en todo el país, alertando que esta situación está paralizando progresivamente las operaciones industriales y comprometiendo la seguridad alimentaria nacional.
La institución advirtió, a través de un comunicado, que la falta de combustibles genera un impacto directo en la producción de bienes esenciales como alimentos, bebidas, productos farmacéuticos y otros insumos industriales, debido a que el transporte de materias primas y productos terminados depende del suministro regular de diésel y gasolina.
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“La situación es crítica y requiere atención inmediata. El país enfrenta una grave crisis de abastecimiento de combustibles que amenaza la estabilidad del aparato productivo nacional”, agrega el comunicado.
La entidad demandó al Gobierno nacional tres acciones urgentes: transparentar la información sobre el estado real del abastecimiento de hidrocarburos, generar certidumbre para los sectores productivos y la ciudadanía, y evitar la desinformación y la especulación que agravan la crisis.
“La falta de información clara está generando incertidumbre y desconfianza, lo que afecta la planificación de la producción y la estabilidad económica”, advierte el pronunciamiento, que recuerda además que la Constitución obliga al Poder Ejecutivo a garantizar la seguridad alimentaria y el normal funcionamiento de las actividades económicas.
La CNI exhortó al Gobierno a adoptar medidas “prudentes, oportunas y responsables” para evitar el colapso de la producción nacional y la pérdida de empleos.
La preocupación del sector industrial se suma a las alertas lanzadas por otras instituciones, como la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y el Comité pro Santa Cruz, que también denunciaron los graves efectos de la escasez de combustible.
BD/LE