La UE estudia usarlos para otorgar préstamos a Kiev, destinados a armas, defensa y necesidades económicas, sin confiscar el dinero y protegiendo la propiedad legal de Rusia
Gente camina cerca de edificios de apartamentos dañados después de un ataque ruso en Kiev, Ucrania, el domingo 28 de septiembre de 2025. (AP Foto/Efrem Lukatsky)
Fuente: infobae.com
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Las naciones de la Unión Europea estudian utilizar los activos del Banco Central de Rusia depositados en el extranjero para otorgar préstamos a Ucrania, con el objetivo de sostener su economía y reforzar su defensa frente a la invasión rusa. La propuesta permitiría que los fondos rusos, congelados desde 2022, financien a Kiev sin que Moscú pueda recuperarlos, salvo que el gobierno ruso acepte compensar los daños ocasionados durante la guerra.
Durante años, las naciones occidentales debatieron cómo usar los activos rusos depositados en el extranjero para apoyar al ejército ucraniano y reconstruir su economía, mientras muchos funcionarios europeos se mostraban escépticos ante el riesgo de que ello constituyera una expropiación ilegal.
Ahora, ante la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de retirar apoyo financiero a Ucrania, los gobiernos europeos buscan llenar el vacío y se muestran más radicales en su enfoque.
El G7 acordó inicialmente no tocar los activos rusos, sino permitir que Ucrania acceda a las ganancias que generan. La nueva propuesta en discusión en la UE permitiría que ese dinero se use para otorgar préstamos a Ucrania, que el gobierno de Kiev podría no tener que reembolsar salvo que Rusia acepte compensar los daños de la guerra.
El bloque europeo avanza con cautela, consciente de que la confiscación total de activos podría generar responsabilidades masivas para los Estados miembros.
Ahora, ante la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de retirar apoyo financiero a Ucrania, los gobiernos europeos buscan llenar el vacío y se muestran más radicales en su enfoque (REUTERS/Kevin Lamarque)
Según el primer plan del G7 en 2024, los países otorgarían a Ucrania préstamos que se reembolsarían con los intereses generados por los activos rusos congelados tras la invasión de Moscú en 2022. La UE acordó otorgar 45.000 millones de euros mediante esta iniciativa.
La propuesta europea ahora busca utilizar los propios activos rusos para desbloquear cerca de 140.000 millones de euros en nuevos préstamos. Rusia no recuperaría los activos, depositados en Euroclear en Bruselas, salvo que acepte financiar la reconstrucción de Ucrania.
Para proteger a Bélgica, que alberga a Euroclear y teme quedar obligada a pagar decenas de miles de millones de euros si Rusia logra la devolución del dinero, la UE diseñaría un contrato de deuda a medida con tipo de interés del 0%, que se activaría si Euroclear se ve obligado a cumplir reclamaciones futuras de Rusia. Bélgica exige garantías legales sólidas sobre este mecanismo.
Los planes europeos cuentan con el respaldo del Reino Unido y Canadá, mientras que Estados Unidos y Japón aún estudian si unirse a la iniciativa. La financiación adicional se utilizaría principalmente para comprar armas, fortalecer la industria de defensa de Ucrania y cubrir necesidades económicas, mientras el Fondo Monetario Internacional estima un déficit de 65.000 millones de dólares en los próximos cuatro años.
La UE diseñaría un contrato de deuda a medida con tipo de interés del 0%, que se activaría si Euroclear se ve obligado a cumplir reclamaciones futuras de Rusia (EP)
La UE evita confiscar los activos directamente debido a preocupaciones legales y económicas. La confiscación podría interpretarse como un robo, incluso si se realiza mediante un acuerdo legal. Francia, Alemania y el Banco Central Europeo advirtieron que la medida podría afectar la estabilidad financiera global y la posición del euro como moneda de reserva, además de incentivar a depositantes de países en desarrollo a retirar dinero de bancos occidentales.
Rusia considera la movilización de sus activos en apoyo a Ucrania como una violación de la propiedad privada y amenaza con represalias, incluyendo la confiscación de activos extranjeros en su territorio.
Desde 2022, se incautaron algunos activos rusos, como yates y propiedades de multimillonarios, en Fiji y España a petición de autoridades estadounidenses. Entre ellos se encuentran el yate Tango de Viktor Vekselberg y propiedades de Suleiman Kerimov y Oleg Deripaska, vinculadas a casos de corrupción, lavado de dinero y violaciones de sanciones.
El yate llamado «Tango», propiedad del multimillonario ruso Viktor Vekselberg (REUTERS/Juan Medina)
El mecanismo europeo permitiría a Ucrania utilizar los fondos congelados sin transferirlos directamente, mediante préstamos respaldados por los activos, asegurando que el dinero solo se emplee si Moscú no paga compensaciones.
Esto garantiza que los Estados miembros mantengan la propiedad legal de los activos, cumpliendo con la legalidad internacional, mientras sostienen a Ucrania frente a la invasión rusa y sus necesidades militares y económicas.