“Bolivia está muy complicada”. Esa es una de las principales conclusiones de la transición. Aseguró que las tareas que se proyectan para los próximos meses van a demandar una coordinación estrecha con varias de las carteras estratégicas del Estado.
Por Mauricio Quiroz Terán
Fuente: eldeber.com.bo
El nuevo ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Mauricio Zamora Liebers, posesionado el domingo 9 de noviembre por el presidente Rodrigo Paz, afirmó que su gestión estará marcada por la lucha frontal contra la corrupción, la reorganización interna del ministerio y una intervención prioritaria en Boliviana de Aviación (BoA), una de las empresas más cuestionadas de la administración saliente.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
En una entrevista con EL DEBER, Zamora aseguró que su designación fue “sorpresiva”, pero que asume el cargo como un voto de confianza del nuevo Gobierno. “Es un gran reto y una enorme responsabilidad. El ministerio es delicado y debemos cuidarlo, sobre todo en temas de corrupción”, sostuvo.
Radiografía y “resonancia magnética” del Estado
Zamora formó parte del equipo de transición y aseguró que cuenta con un diagnóstico preliminar del Estado. Sin embargo, adelantó que la tarea más compleja comenzará ahora: “Hemos hecho una radiografía; ahora, ya dentro del Gobierno, entraremos a una resonancia magnética. Vamos a ver con precisión qué pasa en cada unidad y en cada empresa estratégica”.
El ministro señaló que Obras Públicas hereda “muchas falencias” y procesos sensibles vinculados con contrataciones y licitaciones. Por ello, el eje central de su gestión será la eliminación del tradicional cobro de comisiones ilegales.
“Vamos a acabar con el 10% y el 15%. Eso se terminó. Las licitaciones deben ser sanas y sin corrupción”, afirmó.
BoA será prioridad nacional
Uno de los temas que más preocupa a Zamora es la situación de BoA, marcada por demoras, problemas operativos y cuestionamientos a su administración.
“BoA siempre está en mi cabeza. Le daré un énfasis enorme. La aerolínea debe alinearse a la visión del presidente de abrir Bolivia al mundo”, dijo.
El ministro anunció que buscará inversiones y alianzas internacionales para mejorar la infraestructura aérea y modernizar los servicios.
Cercanía con Rodrigo Paz y conformación del equipo
Zamora admitió tener una amistad de años con el presidente Paz, pero aclaró que su compromiso no es personal, sino institucional: “No solo soy confianza del presidente; soy confianza del pueblo. Esa amistad me obliga a trabajar mejor”.
Explicó que conformará su equipo técnico en los próximos días, con el objetivo de encarar reformas internas, digitalizar trámites y modernizar procesos administrativos.
Transición difícil y falta de información
Sobre el proceso de transición, reconoció que hubo dificultades para obtener información completa de los ministerios y empresas estatales.
“Cuando no había información, me movía para conseguirla. Fueron 17 ministerios y empresas estratégicas; era imposible tener todo. Carla Faval hizo un gran trabajo, y también la ministra Prado (la exministra de la Presidencia) colaboró”, relató
El ministro dijo que ahora, con acceso pleno, se revisará la información a detalle para definir acciones inmediatas.
“El país está en un momento difícil. No tenemos varita mágica, pero si la población nos apoya, vamos a avanzar. Estamos dejando a nuestras familias para trabajar por Bolivia”, expresó. “Bolivia está muy complicada”, puntualizó.
Finalmente, sobre el estado en que el nuevo Gobierno recibe al país, fue directo: “Bolivia está muy, pero muy complicada. Este no es trabajo de un ministerio. Hay que coordinar con economía, hidrocarburos, transporte. Lo dije en gabinete: esto solo funciona si trabajamos en equipo”.
Pese a ello, afirmó que hay voluntad, compromiso y energía para encarar la reconstrucción institucional: “El reto es difícil, pero dijimos que sí porque queremos dar lo mejor”.

