Santa Cruz: Por no asistir a la iglesia, un menonita fue «secuestrado y torturado» por sus vecinos


El juez del Juzgado de El Mechero, en la zona del Plan Tres Mil, dictó detención preventiva de 180 días para el agresor material, mientras que al presunto incitador de la violencia se le otorgaron medidas sustitutivas.
Los implicados en el caso acuden a la audiencia judicial. / FOTO: Unitel


Fuente: Visión 360

Por Jorge Manuel Soruco Ruiz

El sábado 15 de noviembre, un joven menonita de 28 años fue rescatado por la Policía de una vivienda en la comunidad El Norte, ubicada en Cuatro Cañadas, en Santa Cruz. La víctima estaba encerrada contra su voluntad y presentaba señales de tortura, presuntamente infligidas por miembros de su comunidad como «castigo» por no asistir a la iglesia. La justicia dispuso detención preventiva para uno de los acusados por los delitos de secuestro y torturas, mientras que el otro implicado recibió detención domiciliaria.

«Estoy sulfúrica porque no ha habido justicia. En audiencia se determinó que el golpeador tenga detención preventiva en Palmasola y que el otro implicado tenga detención domiciliaria. Este último es un ministro, uno de los que dictan los castigos, y fue quien ordenó que torturen a la víctima», declaró Marianela Bozo, abogada del afectado.

El juez del Juzgado de El Mechero, en la zona del Plan Tres Mil, dictó detención preventiva por 180 días para el agresor material. En cambio, al presunto incitador de la violencia, uno de los ministros de la colonia, se le otorgaron medidas sustitutivas con detención domiciliaria.



De acuerdo con la investigación, la víctima reside en la colonia menonita El Oriente, ubicada en las cercanías de Cuatro Cañadas. Fue la abogada Marianela Bozo quien recibió información sobre lo que ocurría con el joven y, tras presentar una denuncia ante la Policía, logró que se realizara el operativo de rescate.

De acuerdo con la investigación, la víctima fue sacada de su domicilio a las 18:00 del día anterior y retenida contra su voluntad hasta las 6:00 del día siguiente. «Él dejó de asistir a la iglesia, por eso fue la agresión física y psicológica», manifestó Osvaldo Ovando, representante de Derechos Humanos, quien colabora con el afectado. «Ha sido torturado con la correa del vehículo», agregó.

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Por su parte, Guillermo Pérez, abogado de los acusados, considera que la Justicia está cometiendo un error y asegura que sus defendidos no participaron de ninguna agresión.

Durante la audiencia también se observó la presencia de otros pobladores de la colonia menonita. Al ser consultados sobre el hecho, señalaron que conocían a la víctima, pero evitaron brindar mayores declaraciones.