El ataque ocurrió cuando una camioneta apareció sorpresivamente junto al bus, que partió de la capital cruceña rumbó a Trinidad, para posteriormente trasladarse a Riberalta. Los pasajeros no lograron identificar a los ocupantes ni el motivo del ataque
Fuente: eldeber.com.bo
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Un viaje nocturno rumbo a Riberalta casi termina en tragedia. Pasajeros de la flota Vaca Díez denunciaron que el bus, que partió de Santa Cruz rumbo a Beni, fue atacado a balazos en el tramo Yucumo-Rurrenabaque, la noche del martes. Uno de los ocupantes, el periodista Juan Sejas, relató que el conductor tuvo que acelerar a toda velocidad para evitar que los disparos impactaran en el vehículo.
“Nos hicieron cuatro disparos. Gracias a Dios, el chofer arrancó a toda velocidad y pudo eludirlos”, contó Sejas, quien aseguró que dentro del bus “reinó el pánico” mientras los pasajeros se arrojaban al piso para intentar protegerse.
Sejas relató que al principio pensaron que el primer estruendo era el escape de otro vehículo, pero el segundo disparo confirmó el peligro. “Cuando escuchamos el segundo disparo, todos nos tiramos al piso. Los que estaban en la parte panorámica corrieron hacia atrás y nos gritaron que nos lancemos al suelo”, narró.
El ataque ocurrió cuando una camioneta apareció sorpresivamente junto al bus, que partió de la capital cruceña rumbó a Trinidad, para posteriormente trasladarse a Riberalta. Los pasajeros no lograron identificar a los ocupantes ni el motivo del ataque.
“La flota venía a toda velocidad. Luego hicieron el tercer disparo. No sabíamos si la bala podía atravesar el vidrio. Era terror puro”, agregó Sejas.
Según el testimonio, tras el cuarto disparo el conductor dio un retroceso y luego aceleró bruscamente para alejarse del peligro. En medio del caos, algunos pasajeros afirmaron escuchar gritos e intercambio de palabras entre los presuntos atacantes.
Para Sejas, lo más alarmante fue la reacción de la empresa de transporte interdepartamental. “Nos dijeron que no debíamos comunicar nada, que no había pasado nada. Incluso querían que desmintamos la situación en redes sociales”, denunció.
El periodista llegó a transmitir en vivo el momento en que intentó hablar con el chofer de la flota, pero este se negó a dar declaraciones. “El que nada debe, nada teme, dice el refrán. Pero él cerró la puerta y no quiso hablar”, cuestionó.
Algunos pasajeros de nacionalidad brasileña, que habían subido en San Borja, bajaron antes de llegar a destino, lo que llamó la atención de los viajeros, aunque no existe ninguna evidencia que los vincule al ataque.
“Ellos quieren ocultar algo que yo viví. No quieren que se sepa. Pero eso no ayuda a que haya seguridad en la carretera”, afirmó Sejas.
Pidió a las autoridades investigar el ataque y reforzar la vigilancia en la zona. “Quizás hoy solo fue el susto, pero mañana podría morir alguien”, advirtió.
Hasta el momento, la empresa Vaca Díez no emitió ningún pronunciamiento oficial sobre el ataque ni sobre el presunto intento de encubrimiento.
Sin embargo, desde la Federación Departamental del Transporte de Beni, señalaron que no se registró el atentado denunciado contra un bus que cubría la ruta Santa Cruz-Beni-Riberalta. “La directiva de la empresa Vaca Díez nos ha dicho que ese dato es negativo”, aclaró el secretario de los transportistas.

