Un estudio de la consultora internacional S3 Transportation reveló también que el 70% corresponde a gastos fijos y operativos, en un contexto en el que los choferes rechazan nuevos precios del combustible
[Foto referencial: APG Noticias] / En Bolivia rigen nuevos precios para el diésel y la gasolina
“Dadas las características del funcionamiento de las diferentes rutas y líneas en el servicio de las diferentes ciudades, tiene una variación de entre un 25 – 30% de peso, dentro de la estructura de costos, el ítem de los del combustible”, sostuvo el investigador Álvaro Mérida.
El relevamiento se realizó en tres ciudades capitales y se conoce en un escenario de rechazo de los choferes a los nuevos precios del combustible, identificando que, aunque el combustible es un componente sensible dentro de la operación diaria, no es el factor dominante del costo total.
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Según el estudio, la mayor carga económica se concentra en obligaciones permanentes y en el mantenimiento necesario para garantizar la continuidad del servicio, elementos que no dependen de variaciones en los precios de los hidrocarburos.
Mérida detalló que los costos fijos incluyen pagos obligatorios como el SOAT y los impuestos, mientras que los operativos abarcan lubricantes, cambios de aceite, filtros, frenos y neumáticos, con recambios frecuentes.
“Si hablamos en términos generales, básicamente dependiendo el tipo de vehículo, podríamos referirnos en ese rango del 70%, más o menos”, expresó el consultor en entrevista con UNITEL.
Este panorama se presenta tras la reciente actualización del precio de la gasolina especial, que pasó a Bs 6,96 por litro en el marco del Decreto Supremo 5503 de emergencia económica.
Aun con el ajuste, distintos tipos de cambio sitúan su costo entre $us 0,70 y $us 1, manteniéndose entre los más bajos de la región, mientras los nuevos precios regirán por seis meses, de acuerdo con un reporte lanzado tras la aprobación de la norma.
Fuente: UNITEL