Petrobras evita hablar de dichos de embajador boliviano


TRAS LANZAR DUDAS DE SU CAPITAL.

imageLos Tiempos

Una refinería de petróleo de Petrobras en Pernambuco, Brasil. Afp Agencia



La gerente de prensa de la estatal brasileña Petrobras, Tatiana Fontenelle, dijo ayer que esa empresa no emitirá comentarios acerca de las declaraciones del embajador boliviano en Brasil, Jerjes Justiniano, quien esta semana afirmó que sólo el 30 por ciento de su capital es brasileño.

Los especialistas Bernardo Prado y Hugo del Granado coincidieron en que son declaraciones inoportunas y sin fundamento.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Consultada sobre el tema, Fontenelle pidió una copia por correo electrónico de las declaraciones de Justiniano, quien en una entrevista con la revista brasileña Valor afirmó que Petrobras sólo pertenecía en 30 por ciento a Brasil, que era de capital norteamericano y que además sabe dónde hay más reservas de gas natural en Bolivia, pero no le quiere decir al Gobierno.

Un día después de la consulta, Fontenelle respondió ayer que Petrobras no haría ninguna declaración al respecto.

El periodista brasileño que hizo la entrevista a Justiniano dijo que tampoco había podido lograr repercusiones y que Petrobras no suele caracterizarse por su apertura a dar información.

En la Cancillería boliviana se consultó cuál era la postura de Bolivia y si respaldaba al embajador, pero la jefa de la Unidad de Comunicación, Sagrario Urgel, señaló que había que esperar a que las autoridades regresaran de la cita convocada en Nueva York por las Naciones Unidas.

Prado dijo que esas afirmaciones carecen de fundamento y que además “le hacen un flaco favor”  al trabajo de acercamiento de las relaciones entre Petrobras y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), acercamiento que se ha logrado con la firma de los contratos interrumpibles para la exportación de gas natural y, sobre todo, a las intenciones bolivianas de renovar el contrato en firme con Brasil que vence en 2019.

“No le corresponde hacer esas declaraciones. Veo desatinadas las declaraciones, mucho más con un país con el que tenemos una relación energética tan importante”, señaló, añadiendo que el hecho de que Petrobras no emita criterio “dice mucho” y da a entender que considera que ni corresponde responder.

Del Granado coincidió en las críticas con Prado y afirmó que son declaraciones no sólo “inoportunas”, sino “tendenciosas”.

“Lo lamentable es que las hace en un momento en que las relaciones con Brasil no son de las mejores y con Petrobras la relación tuvo un deterioro por varias acciones del Gobierno que fueron hasta agresivas”, dijo en alusión a la toma militar de los campos operados por Petrobras, en 2006, año de la nacionalización de los hidrocarburos; a un decreto que elevaba los impuestos sólo a esa empresa; y a convenios de cooperación energética que se firmaron sin que se hayan ejecutado después. Pero sobre todo en un contexto en el que Bolivia está pendiente de la renegociación del contrato de compra y venta de gas.

Para Del Granado, la evidencia más simple de la propiedad de Petrobras es que el director ejecutivo es nombrado por el Gobierno brasileño, atribución que sólo le compete a los accionistas.

“No le corresponde al embajador verter dudas sobre la rectitud y honorabilidad de esa empresa (…), menos en un momento de mucha sensibilidad”, apuntó.

Sobre las reservas

Petrobras sabe dónde hay reservas de gas natural, pero no lo quiere decir, afirmó el embajador Jerjes Justiniano. El analista Bernardo Prado dijo con sarcasmo que esta afirmación supone dos cosas, que Justiniano lo sabe y tampoco lo dice o que es tan informal que difundió un rumor.

“Debería informarse por lo menos por Internet”, añadió el especialista Hugo del Granado y añadió que, en todo caso, la pregunta sobre dónde hay más reservas debió hacerla a YPFB y al Ministerio de Hidrocarburos, antes de hacer declaraciones.