Juan Francisco Gonzales Urgel
“Reimy Ferreira no es un candidato fuerte pues tendrá que luchar con las pugnas internas para remontar la cuesta de su “elección” y esperar a que la disciplina se imponga a los reclamos de meritocracia partidaria”, reflexionaron.
“Dibujemos la cancha”, se dijeron y de allí “lecturaron” que Percy Fernández y el ventajismo del aparato municipal -en un escenario electoral extremadamente corto, lleno de trampas, feriados y otras “eñes y eses”– era el más difícil competidor a derrotar. Calcularon también que si ganaba la re elección, el saliente Burgomaestre fortalecido, podría tener “más juego de cintura”, y no estaban dispuestos a renunciar, ni a que les quiten un ápice de su parte –a saber- la mitad de la administración municipal.
Practicando el “hoy por ti, mañana por mí”, el MAS apoyó los planes de sucesión de la Sra. Sosa, y juntos, “se despacharon” a Desireé Bravo, la única figura política del oficialismo edil con el peso y los votos para suplantar a Percy en casos de contingencia, y con la fuerza suficiente para enfrentarlos.
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Pero uno de esos casos de contingencia bien podría ser que la candidatura del renunciado Burgomaestre perdiera fuerzas. “No es bueno poner los huevos en una sola canasta”, dedujeron y, “sin querer queriendo” el MAS dejó caminar como independiente la candidatura de Roberto Fernández (su candidato en anteriores elecciones). Para reforzar el pacto “adelantó favores” nombrando a su hombre de confianza -Hugo Siles- como Ministro de Autonomías.
“Habría que darle otro empujoncito a Roberto para emparejar las cosas”, meditaron al tiempo de aupar a un miembro de las varias Juntas Vecinales para que pidiera la inhabilitación de Percy Fernández, bajo el argumento de manoseador de mujeres y peleón con los periodistas. No sería aventurado sospechar que, “por si la leche no cuaja”, los estrategas de “las maniobras envolventes” tienen listo alguno de los “descontentos” de la purga interna para “saltar la tranquera” y protestar, esta vez por su re reelección (tienen tiempo hasta 4 días antes de las elecciones).
El MAS pretende jugar a la “suerte sin blanca” con tres candidatos a la Alcaldía por vía del voto directo, y Concejales de los tres frentes en campaña para cuando sea necesario recurrir a la elección del Alcalde en caso de renuncia voluntaria u obligada.
Afortunadamente hay otras alternativas y otros candidatos para que Santa Cruz de la Sierra no siga los pasos de su vecino Municipio La Guardia.