¿Será cierto que andar en bicicleta puede afectar en la salud sexual de hombres y mujeres?
La pregunta que muchas nos hacemos: ¿andar en bicicleta podría ser malo para la salud sexual? Pues un estudio realizado en la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale, en los Estados Unidos, afirma que sí.
En mujeres disminuye la sensibilidad pélvica
De acuerdo con la investigación, en las mujeres que suelen andar en bicicleta con frecuencia, el daño en su salud sexual se encuentra en la disminución de su sensibilidad genital o pélvica. Además, dicen, podría acarrear otros problemas en la sexualidad de las mujeres, especialmente cuando el manubrio es más bajo que el asiento.
El texto, publicado en la revista Journal of Sexual Medicine, afirma que muchas mujeres que andan en bicicleta o toman clases de spining (con bicicletas estacionarias), se han quejado de adormecimiento y pérdida de sensibilidad en el área genital, por lo que se deduce que el asiento podría ser causa de la molestia y poner en riesgo la salud sexual de las mujeres.
¿Disfunción eréctil en hombres?
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Debido a la presión que ejerce el asiento de la bicicleta en el área genital, se cree que también podría ocasionar trastornos genitales, e incluso disfunción eréctil en hombres. Y es que el asiento comprime el perineo, una región que comprende el piso de la pelvis, entre el ano y el escroto, con nervios y arterial muy importantes en el funcionamiento sexual normal.
Por otro lado, otros estudios han encontrado que los hombres que practican ciclismo con frecuencia tienenmenos conteo espermático y presentan dificultad para concebir, lo que viene a confirmar los hallazgos de la Universidad de Yale.
Se debe modificar la organización de las bicicletas
El estudio de Yale se realizó en mujeres que realizaban trayectos de, al menos, 16 kilómetros a la semana en bicicleta, durante 4 semanas al mes. Las participantes llevaron sus propias bicicletas durante el examen. Las bicicletas tradicionales fueron montadas en máquinas estacionarias para poder ser montadas como si estuvieran en el exterior.
Los investigadores compararon el efecto de diferentes tipos de bicicletas con diversas posiciones de asientos y manubrios. Se midió la presión del piso pélvico de las ciclistas y se realizaron métricas de la sensación genital utilizando un instrumento especial para medir la sensibilidad táctil llamado estesiómetro.
El factor que más daño hacía era la posición del manubrio, entre más bajo estaba del asiento, ejercían mayor presión en el perineo y había una menor sensación del piso pélvico. Aquellos participantes que utilizaban el manubrio caído (donde las manos se colocan más abajo y el ciclista debe inclinarse mucho), presentaban mayor problema.
La conclusión de los expertos es que se debe modificar la organización de la bicicleta para ayudar a aliviar las neuropatías en las mujeres ciclistas, así que mucho cuidado con bajar de más el manubrio y trata de no pasar periodos largos sobre tu bicicleta. El spinning es un ejercicio buenísimo, pero debes tomar algunas medidas de preventivas para evitar que te afecte.
Por: Luz Carmen Meraz| Fuente: Agencias
Fuente: http://www2.esmas.com/