Denuncia. El ministro de Defensa dijo que la nota de un canal brasileño, que muestra la facilidad con que se adquieren armas en Bolivia, no es actual. Anunció una investigación.
Casos. Las incautaciones que hacen los organismos de seguridad muestran que el tráfico de armamento existe (El Deber)
El Día
Jueves, 7 de Enero, 2010
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Ministro admite que en Bolivia trafican armas
San Miguel reconoció la venta de armas a países vecinos. Minimizó las evidencias mostradas por la red O Globo.
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, admitió ayer que hay tráfico de armas en las poblaciones fronterizas como Brasil y Paraguay ante un video difundido por la red O Globo que mostró a militares bolivianos negociando armas con supuestos traficantes encubiertos.
Sin embargo, la autoridad minimizó y restó importancia a las imágenes, argumentando que a veces estas tienen intencionalidad de armar una agenda mediática. “Algunos medios pueden armar las imágenes con cierta intencionalidad, pero no presentan ninguna «versión confirmada», aseveró a tiempo de aclarar que no existe una versión confirmada de que oficiales bolivianos estarían vendiendo armas, subrayó.
San Miguel pidió al Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, almirante José Luis Cabas, inspeccionar las unidades militares acantonadas en la frontera de Bolivia con Paraguay y Brasil para aclarar rumores sobre este supuesto tráfico de armas en esa región.
«Hemos pedido al Comandante que él en persona se traslade a las unidades de frontera mencionadas en esos reportes de prensa para que confirme, desmienta y en su caso inicie algún sumario informativo», sentenció la autoridad.
José Luis Cabas, comandante de las FFAA, dijo desconocer esta actividad ilegal por lo menos en su gestión. “No creo que haya ventas de armas de uso militar porque todo está registrado desde el Ministerio de Defensa en todos los campos y si esto sucediera, saltaría toda una publicación”, afirmó. Sobre el reportaje de la red O Globo en San Ignacio señaló que son imágenes pasadas. “Esta denuncia es de muchos años atrás, esas imágenes son pasadas y además es sólo una fuente de la red O Globo no es más nada”, afirmó la autoridad castrense.
El ex parlamentario y ex viceministro, Ernesto Justiniano, indicó que por este caso existe corrupción tanto en la institución policial y militar. “Esto se está convirtiendo en un coctel mafioso y delictivo que si no se pone un alto va a tener graves consecuencias no solamente en Brasil sino en Bolivia”, analizó.
Todo parece apuntar que el denominado Comando Amazónico, que opera en el norte de La Paz, Beni y Pando, colindante con la frontera con Brasil y Perú, conformado por efectivos de la Fuerza Aérea, el Ejército y la Naval no están sentando precedente en las fronteras.
Según medios de prensa, en Paraguay también existe preocupación en autoridades judiciales por la venta de armas al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), que se adjudicó recientemente el secuestro de un ganadero de ese país.
El Ministerio Público paraguayo no descartó que los seis fusiles FAL robados a un destacamento militar boliviano en la frontera con Paraguay, el 1 de diciembre de 2008, estuvieran en manos de miembros EPP, según el rotativo paraguayo Última Hora.
3.100 kilómetros De frontera comparte Bolivia con el vecino país del Brasil.
El 20% son utilizados por narcos
El mercado negro de las armas en Brasil tiene como principales proveedores a los ejércitos de los países limítrofes como Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay. La División de Represión al tráfico ilícito de armas de la Policía Federal presentó un informe en donde se detalla el armamento que se ha confiscado en las investigaciones contra el crimen organizado.
El informe demuestra que el 20% del arsenal utilizado por las bandas de narcotraficantes en Brasil provienen de redes clandestinas procedente de ejércitos pertenecientes a los países del Mercosur. Cada vez es fácil para los narcos conseguir armas modernas como fusiles FAL, granadas, lanzagranadas, ametralladoras o lanzamisiles personales.
Hace dos años que la PF está trabajando en la investigación para desarticular la red de tráfico de armas. En los últimos periodos se han incautados más de 20 mil armas, entre ellas nueve armas aéreas pertenecientes al ejército boliviano.
El negocio del mercado negro de las armas ilegales viene generando ganancias comparadas al narcotráfico.
La Cancillería y el Ministerio de Defensa del Brasil observaron en las últimas horas con preocupación el alto número de armas de guerra de procedencia boliviana secuestradas en las favelas (barrios pobres) de Río de Janeiro. En los últimos 6 meses 30 ametralladoras antiaéreas fueron confiscadas por la Policía brasileña./Periodismoenlared
Las evidencias
Un periodista se hace pasar por traficante de armas
Se traslada hasta la localidad de San Ignacio de Velasco y toma contacto con un tal Pablo, quien lo conduce hasta los militares bolivianos.
La negociación se hace en presencia de dos militares
Una cámara de la red O Globo capta el momento cuando el periodista encubierto solicita el modelo de armas que deberán entregarse en Santa Cruz.
Los datos
Incautación • El 5 de agosto de 2009, la red O Globo reveló que nueve ametralladoras con el escudo del Ejército boliviano fueron incautadas a grupos de narcotraficantes que controlan las principales favelas (barrios pobres) de Río de Janeiro.
Tránsito • Fuentes brasileñas, dan cuenta que las ametralladoras son enviadas desde Bolivia hasta Paraguay e ingresan a Brasil a través de la ciudad de Foz de Iguazú.
Modelo • Las escopetas calibre 16, los fusiles M16 o calibre 12 y revólveres 9 milímetros son los más requeridos.
Gobierno minimiza reporte sobre tráfico de armas
Denuncia. El ministro de Defensa dijo que la nota de un canal brasileño, que muestra la facilidad con que se adquieren armas en Bolivia, no es actual. Anunció una investigación
El Deber
F. Lacio – G. Arancibia
Un reportaje de la televisión brasileña, que muestra cómo un equipo de periodistas inicia contactos con un hombre, supuesto militar boliviano, para adquirir armas, fue minimizado por el Ministerio de Defensa y el Comando General de las Fuerzas Armadas del país, cuyos máximos representantes expresaron sus dudas acerca de la veracidad de la nota, aunque anuncian una investigación para tener un informe oficial del hecho.
Los periodistas Jonas Campos y Mauricio Ferraz, de la Rede Globo, la más importante de Brasil, presentaron un informe, el domingo 3, donde muestran a un presunto ‘soldado’ que les promete armas, como escopetas calibre 12, una metralleta Uzi con cargadores e incluso un fusil de asalto de uso exclusivo militar, previo pago de una suma de dinero.
Walker San Miguel, ministro de Defensa, de paso en Santa Cruz, dijo que el reportaje de los brasileños no era nuevo como noticia y que éstas, a veces, tienen la intencionalidad de ‘armar una agenda mediática’.
“De parte del Gobierno boliviano y, sobre todo, de las Fuerzas Armadas, no tenemos un parte informativo que hable de pérdida o de venta de armamento hacia la delincuencia organizada”, manifestó el ministro.
Consultado sobre el video en que se observa al uniformado boliviano ofreciendo las armas, San Miguel acotó que ‘en materia de agendas mediáticas, se pueden armar las imágenes’.
Por su lado, el comandante en jefe de las FFAA, almirante Luis Cabas Villegas, manifestó que la información difundida por la televisión de Brasil es de hace un año. Expresó que se investigó el caso, que no existe ninguna anormalidad y que, a la fecha, el registro de armas de la dotación del Ejército es de mucha confiabilidad.
A su turno, el comandante departamental de la Policía, Johnny Vargas, dijo que, según los videos difundidos por la red brasileña, los responsables son militares. “Es un tema en el que la Policía nada tiene que ver”, aseguró Vargas al deslindar responsabilidad de efectivos de su institución.
Aunque las autoridades del ministerio de Defensa y del Ejército restaron importancia al reporte, el ministro San Miguel anunció que pidió al comandante de las FFAA que se traslade a las unidades de frontera para confirmar o desvirtuar la información, y presente un sumario informativo.
Identifican al uniformado de las imágenes
El reporte de la televisión brasileña causó un revuelo en la sociedad ignaciana, porque en éste se señala a la capital velasquina como un punto importante para el tráfico de armas con destino al crimen organizado del vecino país, por lo que las autoridades del lugar procedieron a identificar al uniformado que aparece en las imágenes.
El Comando de Frontera Policial de San Ignacio indicó que el uniformado presuntamente involucrado, que custodia la sucursal de una institución financiera privada con sede en Santa Cruz de la Sierra, pertenece al Batallón de Seguridad Física y que no depende de la dependencia provincial.
En varias ocasiones, los medios brasileños reflejaron el decomiso de armas militares bolivianas, de manos de delincuentes organizados en las favelas de las ciudades más importantes del vecino país. Otro reporte de la Rede Globo incluso mostró una metralleta con el número de registro K 13447 del Ejército de Bolivia, hallada en poder de criminales.
Defensa ordena indagar tráfico de armas a Paraguay
La Prensa
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, instruyó al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, almirante José Luis Cabas, investigar información proveniente de Asunción en sentido de que el irregular Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) opera con armas robadas a un destacamento del Ejército boliviano.
San Miguel solicitó al jefe militar que se desplace a la zona fronteriza para inspeccionar las unidades acampadas en esa región y, “en su caso, inicie algún sumario informativo” sobre el tema.
Si bien la autoridad sostuvo que “a veces” denuncias de este tipo tienen el objetivo de “armar una agenda mediática”, admitió: “Sabemos que hay tráfico ilícito de armas en la frontera paraguayo-boliviana, paraguayo-brasileña”, aunque “lo que no existe es una versión confirmada de que serían oficiales bolivianos los que estarían vendiendo estas armas”.
El fiscal paraguayo Oscar Javier Talavera sospecha que las armas del grupo que secuestró a un ganadero en su país provienen de Bolivia, en especial lanzó meses atrás un allanamiento en el primer departamento de Paraguay en busca del equipamiento bélico.
El 1 de diciembre de 2008, la Agencia de Noticias del Ejército Boliviano (ANEB) informó que un grupo de paraguayos asaltó un puesto militar ubicado en la frontera y tras reducir a seis soldados y un instructor robaron seis fusiles FAL, de fabricación belga.
El asalto ocurrió en la tarde en el puesto militar de Tuscal, ubicado a 850 kilómetros de La Paz y a 160 de Villamontes, desde donde los asaltantes escaparon hacia territorio paraguayo.