Oposición se juega su sobrevivencia en abril

Pugna: En los comicios del 4 de abril se juega el poder regional. El MAS quiere sepultar a la oposición, que está debilitada.

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Inscripción: el ex prefecto Rubén Costas presenta su lista de candidatos anoche en la CDE de Santa Cruz



La Prensa

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En las elecciones departamentales y municipales del próximo 4 de abril, la oposición peleará la última batalla frente al Movimiento Al Socialismo (MAS) por sobrevivir y mantener el poder regional.

Desde las elecciones generales del 18 de diciembre de 2005, los frentes opositores no ganaron ni un solo acto electoral nacional y han perdido paulatinamente en control de poder central y se retiraron a sus regiones.

Dirigentes opositores y oficialistas, y analistas políticos coinciden en que el 4 de abril estará en juego la supervivencia de las fuerzas minoritarias que después de sufrir al menos cinco derrotas electorales se atrincheraron en sus regiones.

El MAS tiene, según su vocero político Jorge Silva, dos retos para los próximos comicios: derrotar políticamente a las fuerzas de oposición “que están en decadencia” y tomar el control de los espacios de poder. “Con la derrota política de la oposición neoliberal, en el marco de la pluralidad democrática, surgirán nuevas fuerzas políticas de la oposición que se enmarquen en este proceso de cambio”.

El ex diputado opositor Carlos Pablo Klinsky situó a los frentes de oposición en la línea de trinchera política desde donde pelearán para mantener la hegemonía regional, pues el MAS logró en diciembre de 2009 penetrar el territorio opositor. La consigna para enfrentar al partido oficialista es unidad y respaldo.

“El poder hegemónico centralista quiere tomar nuestras regiones, pero daremos batalla con candidaturas idóneas, con gente que no le teme a la lucha, estamos en la trinchera política y daremos pelea”.

El candidato a la Gobernación cruceña por la agrupación Todos, Juan Carlos Urenda, dijo que la apuesta de la oposición es frenar la maquinaria electoral del oficialismo, aunque admitió que la debilidad de la oposición es ir dividida.

El ex prefecto de Beni Ernesto Suárez afirmó que el 4 de abril estará en juego el control del poder regional. “De esta elección depende el futuro de la oposición y por supuesto nosotros estamos yendo a ganar con el apoyo de la ciudadanía que aún confía en nosotros”.

En las elecciones del 18 de diciembre de 2005, el MAS quebró la supremacía opositora en el Ejecutivo y en el Legislativo, aunque en el Senado no consiguió obtener mayoría. Empero, la oposición se rearmó en las regiones desplazando a los partidos políticos.

La resistencia de la “media luna” no decayó ni con la ratificación del presidente Evo Morales en el referéndum revocatorio de 2008, pero tuvo su punto culminante en Pando el 11 de septiembre de 2008 con un enfrentamiento que provocó 11 muertes y el enjuiciamiento a sus líderes, como Branko Marinkovic.

Para el analista político Jorge Lazarte, la oposición “tiene el desafío de seguir existiendo porque nacionalmente no existe y tiene una existencia nominal” porque es la única garantía de que en Bolivia haya oposición, aunque minoritaria, ya que el bloque opositor en la Asamblea Legislativa no tiene capacidad de cuestionar y bloquear al oficialismo.

“El Gobierno, como lo tiene todo, la ley no lo limita y tampoco tiene mecanismos de autolimitación, entonces el límite a este crecimiento de poder se juega en las regiones. Las prefecturas pueden generar su propio poder para frenar el poder expansivo del Gobierno. El 4 de abril, la oposición también se juega por ser tomada en cuenta con sus ideas”.

La socióloga cochabambina María Teresa Zegada afirmó que, más allá de los cambios democráticos previstos en la Constitución, como la elección por voto de asambleístas y gobernadores, en abril se trastocarán los esquemas de poder.

“La oposición que está venida a menos en los espacios nacionales probablemente encuentre en los espacios regionales y municipales escenarios para su reconfiguración porque asumirán la conducción de las autonomías y eso significa una nueva distribución del poder”.

TIPS

LOS RESULTADOS DE LOS COMICIOS

En las elecciones generales del 6 de diciembre, Evo Morales ganó en seis de los nueve departamentos: La Paz, Oruro, Potosí, Tarija, Chuquisaca y Cochabamba.

LA PUGNA POR LOS GOBIERNOS LOCALES

El Movimiento Al Socialismo (MAS) definió dos retos para las elecciones del 4 de abril: derrotar políticamente a sus opositores y tomar el poder local.

PLAN POLÍTICO DEL MAS A LARGO PLAZO

El objetivo del oficialismo, una vez que se tome el poder en las regiones, es generar una oposición que pueda responder a los lineamientos del MAS.

NO HAY OPOSICIÓN POLÍTICA

Los asambleístas legislativos de la oposición, según líderes opositores, no tienen la fuerza para bloquear los proyectos del oficialismo.

LA FORTALEZA DE LOS OPOSITORES

Analistas políticos indican que la única garantía para que exista oposición en Bolivia es que las regiones tomen mantengan el poder que tienen ahora.

4 de abril

Elecciones regionales

Esta fecha se elegirá a gobernadores, alcaldes, asambleístas legislativos departamentales y concejales municipales. En el Chaco tarijeño se designará a ejecutivos seccionales de desarrollo.

Opinión

Jorge Lazarte

de un analista político

“ La oposición tiene el desafío de seguir existiendo porque nacionalmente no hay, nacionalmente tiene una existencia nominal y desde el punto de vista de la democracia, la posibilidad de que el poder central pueda encontrar un límite (en las regiones). La oposición está menos fracturada que antes, creo que aprendió de la dura lección de las elecciones de diciembre, allí se jugó todo por el todo y casi lo perdió todo porque cada uno quería ganarlo por separado y terminó perdiendo todo. Ahora están con la idea de que si quieren preservar algo en las regiones tienen que estar juntos, pero es difícil”.