El desistimiento judicial de los principales acusadores del ex prefecto Leopoldo Fernández, dentro del llamado caso Porvenir, viene a confirmar el montaje impulsado desde altas esferas gubernamentales para justificar la violenta toma militar del departamento de Pando.Los hasta hoy acusadores Jorge Borobobo Vaca, Norah Montero viuda de Racua y Carlin Haensel Inuma, representante de las víctimas del 11 de septiembre y ex diputada oficialista, presentaron al Tribunal de Sentencia Sexto sus desistimientos, explicando que fueron manipulados y utilizados desde el gobierno central.Cae así la farsa elaborada desde el poder y que intentó ser apuntalada por el informe de una comisión de la Unasur encabezada por el ex terrorista argentino Rodolfo Mattarollo (ERP), documento que ahora queda completamente desacreditado.La verdad era palpable desde que se conoció el video donde el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana, amenazaba con enviar a Leopoldo “a convivir con los gusanos”, previa al asalto a Porvenir, así como en el informe de UnoAmérica y documentales como “Sumamente Pando” y “Tahuamanu. Morir en Pando”, este último de César Brie, insospechable de cualquier simpatía derechista, donde se daba cuenta de la violencia protagonizada por los aliados regionales del MAS en el departamento amazónico…[email protected]