La desaparición del lago Poopó en Oruro, el segundo más grande del país, develó las debilidades y falta de políticas que enfrentan las autoridades de este departamento en el área de preservación ambiental, pero también reabre el debate sobre las políticas que se implementan en el país para la preservación de recursos naturales, principalmente en el área hidrológica.El departamento de Santa Cruz no se queda al margen de este problema.No obstante, el Servicio de Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (SEARPI) advierte de posibles consecuencias nefastas para el mismo, como la reducción de los niveles de caudales en un futuro, de no atenderse las problemáticas que enfrenta actualmente.La invasión de servidumbres ecológicas, de contaminación de las aguas de los ríos, los cambios de cauce natural del río, la deforestación desmesurada y descontrolada y la urbanización de reservas naturales, son solo algunas de las amenazas que enfrentan los principales alimentadores de agua en el departamento y el país.Preocupa disminución de volumen del río. «Todo esto viene a complicarnos porque las urbanizaciones en estos municipios están arrasando con las quebradas, con los arroyos y lagunas complicando cada día más el escurrimiento superficial y con esto también, al no respetar el medio ambiente, los manantiales que alimentan los ríos subterráneos, estos arroyos y quebradas recargan al Piraí», señala el director de esta instancia, Luis Aguilera.Según explica, al disminuir el volumen de agua de recarga al río Piraí, este disminuye su recarga a los ríos subterráneos que pasan por Santa Cruz, es decir que disminuye o dificulta la captación de estas aguas subterráneas lo que implica un costo operacional elevado, tomando en cuenta que vamos llegando a nivel de 300 metros para obtención de agua.Otro problema que menciona el funcionario es la depredación y explotación de áridos que ya pasa factura a los recursos naturales del departamento.»Están sacando todo lo que pueden con la explotación de áridos agregados y en cierto municipios como El Torno la capa terciaria arcillosa está superficial, en ciertos tramos del Piraí ya no se ven piedras, la arena es una camada que absorbe el agua y hace la recarga, y en la presencia de esta capa terciaria arcillosa cualquier lluvia por más mínima intensidad que tenga se vuelve un turbioncito», señala el experto.Falta coordinación en los tres niveles de Gobierno. «Con todo esto quiero decir que hoy sentimos que el río tiene un menor volumen de agua, porque el cambio climático o el ciclo hidrológico principalmente ha cambiado al no haber bosques, no se da la evotranspiración; al haber pocas aguas menor evaporación, al disminuir las aguas subterráneas que deberán salir en otro punto todo el proceso del ciclo hidrológico se complica», aseveró el experto, quien destacó la necesidad de un trabajo coordinado no solo entre los tres niveles de Gobierno sino de instituciones y organismos de la sociedad. «Si hoy todos, de una forma integrada, no nos proponemos a dar una solución de prevención, podemos sufrir el día de mañana la falta de agua», añadió.Falta apoyo de municipios. Aguilera manifestó su preocupación por la falta de políticas y responsabilidad de gran parte de los municipios para la preservación de recursos y reservas naturales que son fundamentales para la convivencia del hombre.Asimismo el funcionario dejó entrever que como instancia están de manos atadas para poder profundizar el problema ya que el trabajo que hace el Searpi, que es un brazo operativo de la gobernación es hacer monitoreo en el curso natural de La Angostura hasta Portachuelo y dar los respectivos informes a los municipios y gobernaciones «todo este monitoreo es informado a los municipios y la contraloría que hace parte de la gestión ambiental. Si hacemos un análisis, se ha disminuido, no se ha frenado, se ha alertado y se han preocupado, pero es nomás descuidarse y continúa la situación». Y puso como ejemplo la situación que padecen los municipios de La Guardia, Porongo, Santa Cruz, Warnes, Montero Portachuelo, Fernández Alonso, y San Pedro, donde hay serios problemas de servidumbres ecológicas, de contaminación de las aguas de los ríos, de cambios de cauce natural y deforestación.Hay poca atención a reservas. Cabe destacar que anteriormente, el director departamental de Conservación de Patrimonio Natural, Juan Carlos Chávez, lamentó la necesidad de acciones para conservar las áreas protegidas que se convierten en principales alimentadores de los acuíferos del departamento y de los que depende el abastecimiento de agua en el departamento.En ese sentido, puso como ejemplo el poco personal que existe en el Parque Nacional Amboró, donde afirmó, se había reducido la cantidad de guardaparques de 27 funcionarios a menos de 15 personas, lo que significa una luz verde para la depredación y deforestación del mismo.El Amboró se convierte en el principal recurso hidrológico del departamento ya que provee más del 30% del agua potable que se consume. Sin embargo, de acuerdo a lo que estima, con estos riesgos de afectación a la reserva, se corre el riesgo de que entre el 2017 al 2025 esto podría afectar directamente en el abastecimiento de agua potable. En este sentido se aguardan acciones de las autoridades competentes.ProblemáticaLas bondades del río en peligro junto a su principal cuencaEl río Piraí nace de la confluencia del río Bermejo y el río Piojeras. Tiene una longitud de 457 km y desemboca en el río Yapacaní. Su curso pasa por la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, donde divide la sección municipal homónima y la de Porongo a su paso recorre los municipios de El Torno, La Guardia, Santa Cruz de la Sierra, Warnes, Montero dividiendo a este del municipio de Portachuelo en la zona del puente de La Amistad (Ex Eisenhower) para desembocar en el río Yapacaní ubicado en este municipio.Sin embargo, el director del Servicio de Encauzamiento de Aguas de la Cuenca del Río Piraí (Searpi), Luis Aguilera, informó que ese afluente está secándose debido a los avasallamientos de manantiales, la deforestación y la desaparición de las aguas subterráneas.Esa cuenca forma parte del sistema hídrico del Amazonas y tiene una superficie aproximada de 13.466 kilómetro cuadrados.Hay más de 300 explotadoresDe acuerdo con el Searpi, en todo el recorrido desde La Angostura hasta el Puente de La Amistad existen 315 explotadores de áridos y agregados.En lo que corresponde Dragas y Fosas del Total 314 dragas y fosas 210 se encuentran fuera del tercio central lo que corresponde al 67% que se encuentran fuera del área de aprovechamiento.Recomendaciones del Searpi – Los Gobiernos Municipales, mediante evaluaciones anuales y en función a sus normas de manejo de ríos y cuencas y las normas de explotación de agregados, a través de autorizaciones anuales, podrán permitir a terceros la explotación de agregados. Las concesiones realizadas a la fecha y que cumplen con los requisitos legales y técnicos para la explotación de agregados, deben sujetarse a las normas de manejo de los ríos y cuencas y a la regulación de los Gobiernos Municipales.Existe extracción de áridos fuera del tercio central tal como se demuestra en el informe y anexos con coordenadas y fotografías. Extracción de áridos cercana a puentes y cruces a las comunidades cercanas, sin respetar el margen establecido (500 m para puentes y 200 m para cruces comunitarios) para no dañar las estructuras y cruces de las comunidades.Asentamientos que no se enmarquen dentro de las leyes y normas establecidas como la ley de Medio Ambiente, Ley Forestal y Ley de Áridos y así también la Ley de Gestión de Riegos y Atención de Desastres. En el informe se reflejan los resúmenes y en anexos las coordenadas con sus respectivas fotografías. Situación que desde el año 2009, cuando se realizan los primeros diagnósticos del Searpi, a la fecha no está cambiando y se sigue permitiendo asentamientos y depredación de bosques, situación que en reiterados oficios del Searpi se ha informado a la Autoridad de Bosques y Tierras ABT y no ha tomado acciones al respecto.Punto de vistaNo se pueden tomar acciones con leyes obsoletas»Jorge QuintanillaAmbientalista‘El panorama hídrico del país no es bueno porque no existe una ley de agua vigente actual, la ley es de 1906 entonces si no hay una voluntad política una ley marco, una ley madre, el resto no va andar bien.La ley marco está obsoleta y hay como cuarenta propuestas que no ha pasado nada, partamos de actualizar la ley de aguas y recursos hídricos.La primera medida que se debe realizar es una ley de aguas actualizada, pues si no hay marco legal vigente no se puede pedir nada todos tienen que actuar.Hay que empezar a tomar conciencia de toda la ciudadanía porque malgastamos el agua no hay conciencia de la necesidad que vamos a tener.La tercera guerra mundial va ser por el agua, Si no se toman previsiones lastimosamente vamos a llegar a ese fin donde vamos a agotar el recurso de agua dulce y el costo de tratamiento de agua es demasiado caro, no estamos teniendo conciencia de que el agua se está convirtiendo en un recurso natural no renovable.La conciencia debe partir no solo desde las autoridades y los niveles de Gobierno sino de todas las instancias involucradas e instituciones de la sociedad.Asimismo, hay que realizar una tarea conjunta para poder concienciar sobre la importancia del agua y nuestros recursos naturales que son la base de la conservación de los mismos.FUENTE: EL DÍA