Esa fascinación que es casi un fetichismo por los tancones…
La mayoría de los hombres son como una «caja de pandora» en lo que a fantasías sexuales se refiere. Hay una serie de razones por las que cuando ven a una mujer semi desnuda con tacones se excitan desde los pies a la cabeza. ¡Conoce todos los motivos ahora mismo!
Erotismo sin fin
Los tacones de algún modo simbolizan a la mujer fatal, que camina con movimientos de caderas sugerentes y labios color carmín. Y aunque todas sabemos que ese no es más que un estereotipo porque usar tacones nada tiene que ver con eso, ellos en su cabeza lo ven de esa forma y por eso es como un disparador de su deseo.
Llevar tacones nos hace más esbeltas y con un trasero más prominente, caminamos más derechas y en consecuencia los pechos también se ven más grandes. Y cuando las mujeres nos sentimos atractivas y seguras los hombres pueden «respirarlo en el ambiente».
Además, al usar tacones nuestras piernas se acentúan, y es como si un camino sinuoso comenzara desde el piso en dirección a la zona en que ellos desean llegar. Y mucho más atractivas les resultan nuestras piernas cuando vestimos medias tipo de red.
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Una fantasía… ¿compartida?
Seamos realistas, no siempre es posible mantener un encuentro íntimo montada en semejantes plataformas, sobre todo si ambos son muy activos en la cama porque además de ser incómodo, alguno podría terminar herido o con alguna rozadura no deseada a causa de los tacones. Pero durante los juegos previos puede ser un «plus» en una relación íntima.
Tacones, uñas y labios en rojo y un sugerente conjunto de lencería conforma para muchos hombres una de sus mejores fantasías sexuales. ¿Estás dispuesta a cumplirla?
Sea cual sea la fantasía que tenga tu chico y que te confiese quiere cumplirla contigo, antes deberías preguntarte qué quieres tú. Volver realidad un deseo del otro es también una forma de demostrar amor, pero si tú no estás dispuesta a hacerlo y él insiste, ¿no sería una actitud un poco egoísta de su parte?
Puedes subirte a tus tacones todas las veces que quieras para lograr tu objetivo de seducirlo, pero si no te sientes cómoda al hacer algo que te piden, no lo hagas. Fuente: www.imujer.com