«La intención del ministro Quintana es asesinar a Eduardo León»

“Comenzó la persecución, la noche de los cuchillos largos”

León está detenido en celdas judiciales desde hace siete días, sin ser cautelado, el juez incluso rechazó la imputación que planteó la Fiscalía “por estar mal”.“Comenzó la persecución, la noche de los cuchillos largos”Página Siete / Beatriz Layme / La PazEduardo León, abogado de Gabriela Zapata, expareja del Presidente, detenido en celdas judiciales desde hace siete días, aseguró que continuará firme en su trabajo y en su lucha por sacar a luz la verdad porque considera que la democracia en Bolivia «se muere”.El jurista habló con Página Siete después de su audiencia cautelar, que se suspendió ayer por tercera vez, debido a que está pendiente la resolución de la acción de libertad que planteó.La acción de libertad pasó de mano en mano, inicialmente debía ser resuelto por un juez de La Paz, pero éste se excusó. Ante esta situación fue a manos de un juez de El Alto, quien también se excusó; luego, el caso fue remitido Viacha, pero en ese distrito no existe un juez. Frente a este hecho, el caso fue hasta la ciudad de Oruro, y ayer el juez Franco Zanabria Soliz lo devolvió a la ciudad de La Paz.El jurista también denunció que personas desconocidas lo visitaron a nombre del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, para amenazarle de muerte si continuaba declarando e informando sobre el presunto tráfico de influencias.León está acusado de cuatro delitos, uno de ellos es trata de menores, porque presuntamente presentó fotografías de cuatro menores y a un niño ante la jueza de la Niñez y Adolescencia, Jacqueline Rada, como si fuera el hijo del presidente Evo Morales. Por este caso también están acusados sus colegas William Sánchez y Wálter Zuleta, de quienes se desconoce su paradero.El abogado León se declaró como «perseguido político”. «Me declaro un perseguido político sin tener un partido, sin tener relación o afinidad política”.Aparentemente hubo irregularidades en su proceso, ¿qué opina?La primera irregularidad es que cuando se apertura el caso, cuando se me aprehende no había control jurisdiccional; vale decir,   se me aprehende el 17 de mayo y entonces la Fiscalía comunica al juez  que recién se iniciaría la investigación, por lo que no había ningún control jurisdiccional ni para la declaración, ni para la aprehensión, ni para la colección de elementos indiciarios en este caso.Ahora estoy siete días detenido, no sé por qué estoy detenido, ni siquiera  hay la imputación formal, lo que demuestra la pobreza jurídica con la que están actuando.¿Alguna vez pensó vivir esta situación? Bolivia tiene la peor justicia, la justicia está en terapia intensiva y esta es la muestra de cómo se maneja la justicia en Bolivia. Quiero advertir que ha empezado la noche de los cuchillos largos, la persecución de todos los ciudadanos, a la prensa, a los abogados, opinadores, a todos los políticos que pudieran estar en contra de gobierno fallido. Pero quiero decirles que yo voy a seguir firme en este trabajo, en la lucha por la democracia que se nos muere, debemos luchar porque esto no sea así.¿Zapata le tendió una trampa o le mostró algunas pruebas?Creo que hubo un complot, no de parte de Gabriela Zapata. El objetivo era bajar a Eduardo León, ya hubo amenazas al respecto. En el momento en que la señora Zapata comenzó a entregar los documentos, principalmente al otro abogado, es cuando inicia esta persecución, pero más allá de eso es que la función única que he cumplido es de abogado.¿Gabriela Zapata le dio alguna documentación?Dentro del tema de tráfico de influencias hay algunos elementos concluyentes y evidentes, yo quiero entender que el señor Ministro de la Presidencia conoce de esas pruebas, por eso es que comienza a horrorizarse y atacar, como si fuese un cowboy lanzando disparos a todo lado, a la prensa, a los abogados.¿El objetivo es que no hable?Lo que pasa es que no sólo me quieren acallar. Quiero denunciar de manera pública  que el Ministro de la Presidencia quiere hacerme asesinar, eso es lo que quiere porque han venido inclusive a estas celdas (señalando), que si yo continuaba realizando denuncias, declaraciones, no sólo me quedaría en la cárcel porque la cárcel es muy corta para mí; la intención del Ministro de la Presidencia es asesinar a Eduardo León, él es quien quiere mandarme a matar y me dijeron que la cárcel es la antesala del cementerio. ¿Pero con eso qué se evitaría? El Gobierno saldría mal parado.El objetivo inmediato es callarme, pretenden que la señora Zapata  se quede ahí sin poder presentar  lo que debía presentar, pero en algún momento los documentos saldrán a la luz porque están ahí, donde están las autoridades, donde saben que tiene mucha relación con contratos y firmas de muchos documentos.¿Qué le dice a la población boliviana? Soy una persona que por mucho tiempo he sufrido, (fui) muy pobre, pero con dignidad y con trabajo (he conseguido) lo poco que tengo. Tengo una familia, dos hijas, gente que me está acompañando y les digo que este es un precedente muy grave para Bolivia.