Cardenal: los ataques no nos asustan


‘La Iglesia hace política por el bien común pero no politiquería’

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El cardenal Julio Terrazas llegó ayer de su visita al papa Benedicto XVI en Roma y con un tono sereno pero enérgico, aclaró que las acusaciones que ha recibido la Iglesia Católica, no los asustan ni los acallarán, porque están cumpliendo con su rol “político del bien común y no con politiquería”.

El Nuevo Día

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El vicepresidente Álvaro García Linera no tardó en responderle al Cardenal, recomendándole que “se dediquen a salvar almas y que dejen al Gobierno organizar la vida política del país”. “Al César lo que es del César, a Dios lo que es de Dios y al Gobierno lo que es del Gobierno”, sentenció García Linera, explicando que cuando se mezclan las competencias surgen los problemas.

Un nuevo intercambio de palabras subidas de tono surgen entre la Iglesia y el Gobierno, luego que el viceministro de Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, criticó al Cardenal, calificándolo de mentiroso y jerarca, por elevar un informe al Papa el pasado lunes 10, en la visita “ad limina”, donde explicaron que en el intento de refundar Bolivia, las medidas políticas y los mecanismos jurídicos no eran los adecuados.

“Estas cosas pasan, pueden pasar y van a seguir pasando, no nos asustan y ustedes me entienden algo del humor vallegrandino, de aquí a cinco años cuando vuelva a visitar al Santo Padre voy a mandar mi discurso para que algunos de los miembros del Gobierno lo corrijan bien y vaya realmente de acuerdo a la libertad de expresión que dicen que hay en Bolivia”, dijo Terrazas señalando que las dificultades en el lenguaje pueden ser corregidas, pero que asumir un argumento para eliminar a la Iglesia, la fe del pueblo y la religiosidad es otra cosa.

Terrazas contestó ante la interrogante ¿si el Cardenal hace política?. “Qué quieren que haga un Cardenal, esto es la ciudad, es el pueblo, el que le interesa, es por el bien, eso es hacer política por el bien común”, pero se resistió a siquiera considerar que esté haciendo politiquería de partidos.

Sin embargo y a pesar del intercambio de calificativos con el Gobierno, el Cardenal ratificó que en el país sucedieron expresiones duras de racismo de ambos lados. Añadió que es parte de la visión el que no los entiendan o los entiendan mal, pero que cuando usan el apoyo de la Iglesia sólo para algunas cosas y no para construir la verdad, surgen las dificultades.

Por su parte el prefecto de Cochabamba y ex sacerdote jesuita, Rafael Puente, continuó ayer la arremetida contra la Iglesia, pero esta vez contra el Papa, a quien le dijo que no debe hablar de los problemas internos del país. El pontífice después de conocer el informe de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) manifestó su preocupación por Bolivia.

Un día antes Puente acusó directamente al Cardenal de mantener una relación directa con grupos de poder del oriente.

“Hay algunos ataques duros e inclusive de algunos que se han formado con nosotros, pero no nos duelen no vamos a entrar a combatir palabra con palabra, calificativos contra calificativos”, dijo el Cardenal.

Los enfrentamientos verbales

Informe al Papa • La Conferencia Episcopal Bolivia presentó un informe ante el Papa en la visita “ad limina” donde habló sobre la situación del país y las medidas que no son adecuadas para refundar el país y eliminar la pobreza, el racismo y la discriminación.

Ataque al Cardenal • El viceministro de Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, acusó al Cardenal de mentiroso y jerarca, aclarando que no es con toda la Iglesia sino con algunos.

Obispos salen en defensa • El monseñor Jesús Juárez, obispo de El Alto, dijo que ante el proceso de cambio debe haber la libertad de sentirse libres para desenmascarar situaciones que no contribuyan al cambio que el pueblo boliviano espera.

Arremetida masista • El prefecto de Cochabamba, Rafael Puente, afín al MAS, calificó al Cardenal con una mentalidad colonial y que no son serviles al pueblo pobre. Un día después añadió que existe una alianza con el poder oriental.

Palabra oficial • El Cardenal ratificó que si hubo racismo pero de ambos lados. Recordó que a la Iglesia no se la debe utilizar sólo cuando se busca apoyo.

«Asumir como un argumento para eliminar algo que no es obra del Cardenal, la Iglesia, la fe del pueblo, la religiosidad de la gente es otra cosa.»

«¿Que el Cardenal hace política? qué quieren que haga un Cardenal, es el pueblo el que le interesa, es hacer política por el bien común.»

«Esas cosas pasan y van a seguir pasando, no nos asustan ni nos preocupan pero comenzar un ataque duro contra la Iglesia, no nos duele» .JULIO TERRAZAS, Cardenal.

 

GARCÍA LINERA PIDE A LA IGLESIA OCUPARSE DE «SALVAR ALMAS»

Cardenal: los ataques no nos asustan

Los Tiempos

Santa Cruz | Agencias. «¿Qué quieren que haga un Cardenal? Es el pueblo que le interesa y eso es hacer política por el bien común de todos, lo otro, que a lo mejor quieren decir y esto me resisto a admitirlo, es que entre a su politiquería, ahí no ingresa el Cardenal», manifestó el cardenal Julio Terrazas ayer en respuesta a los ataques del Gobierno contra la Iglesia Católica y su persona.

El prelado, que retornó ayer de Roma después de realizar la visita Ad Límina y reunirse con el Papa Benedicto XVI, manifestó su extrañeza por la reacción de algunas autoridades gubernamentales al mensaje que llevaron los obispos al Pontífice sobre la situación que vive el país, un «informe mentiroso», según el Gobierno.

«Si ustedes leen nuestro mensaje que ha sido preparado con la debida anticipación, no hay nada condenatorio contra nadie, es un mensaje que busca la convivencia humana, no sé con qué criterio se ha tergiversado» afirmó el Cardenal.

«Los ataques sin medida y sin razón no nos asustan y no van a callarnos, vamos a seguir sembrando la paz y esperanza, el evangelio no es politiquería», remarcó la autoridad eclesiástica.

Señaló que esta preocupación de la Iglesia busca que la gente sea capaz de hacer su propia historia y que llegue a ese «fin que el Señor quiere para todos nosotros: la libertad de los hijos de Dios». «Nos preocupa el pueblo, pero nos preocupa su auténtica liberación, nos preocupa la gente pobre, pero no para darle una cosa y tenerlos sometidos», dijo.

Ante estas declaraciones, el vicepresidente Álvaro García Linera volvió ayer a arremeter contra el Cardenal y la Iglesia Católica, pidió a Terrazas no ocuparse de asuntos que competen al Gobierno. «La Iglesia se tiene que dedicar a salvar almas y nosotros nos tenemos que dedicar como Gobierno a organizar la vida política, económica y social de la sociedad, lo que es del César (al César) y del Gobierno al Gobierno, lo que es de Dios y el espíritu a Dios, cuando se quieren cruzar las competencias y se involucran funciones andamos mal», aseveró García Linera.