Los hijos de Ramzan Kadyrov, Presidente del país, combatieron contra otros niños en un evento difundido por la televisión. La decisión ha provocado discusiones en el mundo del deporte
El presidente de Chechenia, Ramzán Kadírov, postuló a sus tres hijos para que peleen ferozmente en un octágono frente a otros niños de entre 8 y 12 años.
Las peleas fueron organizadas sobre el marco de un torneo internacional de artes marciales mixtas y se llevaron a cabo en Grozni, la capital del país chechén.
Las imágenes muestran como esos niños de no más de 13 años cruzan patadas y puñetazos sin ningún tipo de protección y enjaulados, al igual que los adultos profesionales que compiten en el UFC.
La transmisión de los combates fue de público conocimiento, ya que se llevó a cabo en un canal deportivo ruso. La situación generó fuertes críticas por parte de la sociedad.
Dmitri Peskov, el vocero presidencial, aseguró que: «Puedo apostar que muy poca gente ha visto lo que pasó en realidad. Una cosa es que las imágenes se correspondan con la realidad, pero no es así, hay que evitar levantar polémica», tratando de defender al evento.
Anna Kuznetsova, defensora de los Derechos del Menor en Rusia, pidió información sobre lo ocurrido en Chechenia y advirtió que «la salud y la seguridad de los niños es una prioridad».
También agregó que «puede que los combates sean de exhibición pero los golpes eran de verdad».
En tanto, el presidente checheno, Ramzan Kadyrov, se mostró muy orgulloso de su hijo Ajmad, de 10 años. «Lleva varios años practicando boxeo, judo, karate y artes marciales mixtas. En el combate de la categoría hasta 33 kilos, derrotó por K.O a su rival en sólo 14 segundos y se proclamó campeón del torneo».
Finalmente, el cuatro veces campeón mundial ruso, Fedor Emelianenko recordó que «todos los luchadores menores de 21 años deben competir con casco y protecciones, mientras que los niños menores de 12 años no pueden ni asistir como espectadores a estos combates».
También condenó al evento y lo catalogó como «inadmisible». «Pequeños de ocho años se atizaban entre sí ante la divertida mirada de los adultos. Me indigna muchísimo que el presidente lo presenciara todo».
LEA MÁS:
Fuente: infobae.com