La detención de “Chito” Valle provoca satisfacción por cuanto es una clara señal de que nadie es impunemente poderoso y siempre llega el momento de rendir cuentas. Esta es una lección que deberían haber asumido los gobiernos del pasado y que no debiera pasar por alto el actual.
Luis Alberto Valle, cuando fue aprehendido en Santa Cruz, el 27 de febrero de 2007. Fue trasladado a La Paz y recluido fugazmente en el penal de San Pedro (foto archivo La Prensa)
“Chito” se benefició de su parentesco con el ex presidente Hugo Banzer y no tuvo reparos en utilizar el poder que emergía de esta relación. Su calidad de yerno especialmente favorito de doña Yolanda Prada, le dio para todo. Vender como chatarra vehículos de la prefectura paceña y algo que ciertamente suena a burla: hacerse instalar un lujoso dormitorio aledaño a su despacho.
Es que ese momentáneo ejercicio del poder puede tener efectos muy nocivos en la mente de algunas personas y les hace perder todo sentido de la realidad y de las proporciones sumergiéndolos en un mundo ficticio que suponen, será eterno.
Muchos opinan que el poder es la droga más nociva y perjudicial que existe pero todos quienes llegan a ejercerlo debieran tener en cuenta que no podrán disfrutar eternamente de él ya que igual que veleidosa cortesana, siempre acaba abandonando a sus eventuales favorecidos.
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Muchos de los actuales funcionarios de gobierno debieran verse en el espejo de “Chito”. Es probable que mientras disfrutan de las mieles del poder se sientan al amparo de cualquier investigación, siempre y cuando sigan disfrutando de la confianza de Evo pero es claro que jugar con el poder es jugar con fuego y las posibilidades de quemarse son muy grandes, muy particularmente cuando se actúa discrecionalmente.
Haría muy mal el gobierno en pretender utilizar la captura de “Chito”Valle para intentar apaciguar sus conflictos internos o, peor aún, utilizar la corrupción del pasado para justificar la actual.
En el gobierno del MAS existen varios nuevos ricos que es muy probable tendrán muchas dificultades para explicar en el futuro el origen de sus fortunas. Es seguro que quienes tuvieron a su cargo el manejo de los recursos que envía el venezolano Hugo Chávez para el programa de Evo estarán dentro de la lista cuando se derrumbe el mito del “proceso de cambio” y todos despertemos a la realidad de golpe y porrazo.
Es que de manera recurrente se menciona a la corrupción existente en el periodo neoliberal como poniéndose el parche antes de la herida y la ministra Anticorrupción Nardi Suxo es poco equitativa en su lucha ya que se muestra muy benevolente con sus correligionarios y drástica con los opositores.
Para muestra un botón: el opositor alcalde de Potosí, René Joaquino, fue desplazado del cargo por haber comprado un lote de vehículos usados por un monto algo mayor a los cien mil dólares. La acusación radica principalmente en que la adquisición se realizó sin una previa licitación.
Sin embargo, el gobierno compra un avión de lujo a un costo de casi 40 millones de dólares con un evidente sobreprecio y sin licitación alguna pero el Contralor Herbas ni Nardi Suxo se atreven a decir esta boca es mía porque saben que la responsabilidad de esta compra irregular alcanza al propio Evo Morales.
Como se está administrando el país, es evidente que en el futuro habrán otros “chitos” y que igual que el original supusieron que estarían siempre en el poder para tapar sus tropelías.