Medición de cultivos de coca empezará el 4 de octubre

Gobierno y cocaleros acuerdan erradicación paulatina de coca yungueña ilegal hasta 2010. El Ejecutivo reconoció que hay cocales en las provincias Murillo, Muñecas e incluso en José Ballivián, del Beni.

LA PRENSA



El Gobierno y los productores de la hoja de coca de los Yungas, La Asunta e Inquisivi firmaron ayer un acuerdo para iniciar el 4 de octubre la medición de cultivos ilegales y la erradicación paulatina de al menos 6.900 hectáreas ilegales de ese producto hasta 2010. El Ejecutivo reconoció que hay cocales en las provincias Murillo, Muñecas e incluso en José Ballivián, del Beni.

El convenio fue firmado en el Palacio Quemado por el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, quien subrayó que el convenio fue negociado durante los dos años anteriores con el objetivo de proseguir con la erradicación y sustitución de cultivos por productos alimenticios «de manera pacífica y en común acuerdo con los productores».

«Éste —dijo la autoridad— es un Gobierno que ha dicho claramente que no va a haber coca cero, que esas políticas que llevaron a violaciones de derechos humanos y enfrentamientos entre bolivianos quedaron en el pasado y que este Gobierno va a respetar la hoja de coca como parte de nuestra cultura milenaria».

Confirmó que en Bolivia «no puede haber libre cultivo de la coca y que, así como la industrialización, debe estar regida por las normas legales, pero fundamentalmente por acuerdos entre los productores, los verdaderos productores de la hoja de coca y el Gobierno nacional».

La Ley 1008 sólo permite en Nor y Sud Yungas y La Asunta 12.000 hectáreas.

El compromiso

El ejecutivo del Consejo de Federaciones Campesinas de los Yungas (Cofecay), Félix Barra, recordó que «los gobiernos neoliberales querían erradicar coca a la fuerza por mandato de Estados Unidos, con lo cual ponían en riesgo muchas vidas. Pero en los Yungas no ha muerto ni una sola persona en los anteriores programas de sustitución».

Estados Unidos incluyó, hace tres días y por primera vez, a Bolivia en su lista de países que incumplen con los planes de Washington de lucha contra el narcotráfico, pese a lo cual anunció que no suspendería su asistencia económica, porque la considera de «interés nacional».

El Ejecutivo boliviano dijo que el país del norte hizo una calificación «política» y «amañada» y reiteró su decisión de proseguir con su política estatal.

El Ejecutivo de la Asociación de Productores de Coca de La Paz (Adepcoca), Hernán Justo, se comprometió a trabajar con el Ejecutivo para «derrotar al narcotráfico, y esto que lo sepan bien la ONU y los países que nos quieren imponer políticas de eliminación de coca con violencia».

INDUSTRIALIZACIÓN

De acuerdo con el documento, el Viceministro de Coca y Desarrollo Alternativo iniciará la ejecución del programa de industrialización de la hoja de los Yungas, Inquisivi y La Asunta en no más de 60 días. Con este objetivo, Adepcoca proporcionará al Gobierno un terreno de mil metros cuadrados en la ciudad de La Paz, en los siguientes 30 días, donde se montará una fábrica con ese propósito. El acuerdo también establece el mejoramiento del control de comercio legal, la planificación de proyecto de desarrollo de cultivos alternativos, como frutas cítricas y dulces, y la delimitación de las áreas de producción tradicional, susceptibles de expansión y de erradicación.

El viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, explicó este jueves a La Prensa que por el momento se estableció que las provincias Nor y Sud Yungas e Inquisivi poseen 161.866 hectáreas aptas para la siembra de la hoja de coca pero «donde no se deberá permitir la plantación de nuevos cultivos».

«En realidad —explicó Cáceres— esa cantidad de tierra es como un cinturón de seguridad para evitar la expansión de los cultivos. Adentro quedan las localidades de las provincias antes mencionadas, donde se tienen cultivos tradicionales, con otra población que está fuera del límite y algunas con registro de catastro (temporal)».

394 COMUNIDADES LEGALES

En el documento firmado ayer se establece además que en Nor y Sud Yungas, Inquisivi y La Asunta hay 394 comunidades ubicadas dentro de la zona tradicional de cultivo de cocales, «donde los cultivos serán de por vida y sin reducción»; 37 que están en el área de registro de catastro, que requiere la renovación de la licencia de producción, y 41, fuera del límite, que deberán ingresar de manera forzada al plan de sustitución.

En estas últimas comunidades se encuentran las 6.900 hectáreas excedentarias, identificadas en estudios recientes de la ONU con asistencia de satélites.

Cáceres añadió que al menos el 40 por ciento de la coca excedentaria se encuentra en la localidad de La Asunta, pero para «determinar la cantidad exacta se deberá hacer la revisión de las licencias, medir las plantaciones, ver su nivel de producción y tomar en cuenta otros detalles». Consideró que con estas «previsiones» no podrá haber «ningún motivo para hacer protestas ni negativas para no acatar la ley».

El Viceministro recordó que un estudio de las Naciones Unidas (ONU), de este año, reveló que el crecimiento vegetativo anual de cultivos de coca es de 5 por ciento en el departamento de La Paz.

Otra particularidad del proceso de erradicación es que, según consta en el documento, «a sola denuncia de una comunidad de que existen poblaciones nuevas dentro del cordón tradicional se debe llevar adelante la verificación de documentos», más los estudios de campo correspondientes para determinar si se mantiene los cocales o se los elimina.

El programa de erradicación empezará el 4 de octubre e implicará la industrialización de la coca.

HAY CULTIVOS ILEGALES EN MUÑECAS, MURILLO Y BENI

El Gobierno reconoció este jueves que el cultivo de coca ilegal se extendió a las provincias paceñas de Murillo, Muñecas y Franz Tamayo. Aunque admitió que aún no hay fecha para el inicio del estudio de erradicación en esas regiones.

El viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, comentó que la situación «es preocupante, porque se dice que también hay cultivos en la localidad de Palos Blancos (Sud Yungas) y al frente, es decir, en la provincia José Ballivián, del Beni».

Adelantó que, una vez hecho el estudio correspondiente, se «erradicará de manera forzada todo lo que no sea legal, lo que no esté permitido». En el caso de la provincia Muñecas, la autoridad puntualizó que hasta hace unos cinco años había 60 hectáreas, que «hoy han crecido a 300 hectáreas. Eso es lo que se conoce en este momento».

Mencionó que «se sospecha que una parte de esa producción va a parar al narcotráfico, pero eso es algo que tenemos que determinar. No lo podemos afirmar de manera contundente, porque en esas regiones hay muchos consumidores de coca».

Habló también de Apolobamba, capital de la provincia Franz Tamayo, donde se «cree que hay 3.500 hectáreas» de cocales.

Para esta región se deberá hacer un estudio especial, pero el Gobierno aún no tiene financiamiento, que espera conseguir para 2009.

MÁS DATOS

Aún no se tiene un plan de erradicación de cultivos ilegales en Apolo, Muñecas y Murillo.

Los cocaleros yungueños darán en 60 días un terreno para una industrializadora.

El Ejecutivo dice que hay más de 6.900 hectáreas ilegales en los Yungas, Inquisivi y La Asunta.