Una ministra española ha eliminado los mitos y leyendas que rodearon a la intervención de Evo Morales y Hugo Chávez en la cumbre sobre el cambio climático de Copenhague. Mientras que el presidente boliviano habló de la Pachamama, el hundimiento de las islas y de eliminar el capitalismo, la ministra de Medio Ambiente de España, Elena Espinosa, dijo que ambos mandatarios, –que ayudaron a boicotear un acuerdo en Dinamarca–, sólo estaban defendiendo el gas y el petróleo. La dignataria considera que todo el palabrerío de los mandatarios sudamericanos estuvo dirigido a defender la producción de hidrocarburos y evitar que una política mundial de control de emisiones de gases pueda comprometer el desarrollo de ambos países, basado en la explotación de los llamados “combustibles fósiles”, duramente cuestionados por los ambientalistas. En el caso venezolano, Chávez defiende su derecho a seguir nutriendo de petróleo a los que él llama imperialistas y Morales, la posibilidad de seguir vendiéndole gas a la poderosa industria paulista, que de socialista no tiene nada.
Bajo el penoco