El tren le cercenó la pierna

Ganarse unos pesos para pasar la navidad le costó la amputación de la pierna izquierda a Carlos Alberto Quezada Montero tras ser arrollado por las ruedas del vagón de tren en el barrio Latino, zona de la refinería de Palmasola. El estudiante de 18 años junto a una veintena de jóvenes a las 23.30 del pasado martes intentó sacar residuos de diesel de uno de los vagones que se dedican al transporte de este combustible y corrió tras el tren en movimiento sin percatarse que a un lado de las rieles estaban clavados postes de fierro, llegando a chocar por la poca visibilidad contra uno de los puntales que lo impulsó contra ruedas del tren y le cercenó gran parte de su pierna, contó Blanca Montero Rivero, tía de la víctima.

La madre del joven Flora Montero Rivero se encuentra más de 10 años en España y su padre Justo Hernán Quezada falleció cuando era chico. Sus familiares pidieron ayer la solidaridad de las personas para cubrir los gastos médicos pues en menos de 48 horas llevan gastando más de 2 mil dólares en recetas e internación. La víctima no hace mucho había festejado sus 18 años y el próximo año le tocaba recibirse de bachiller en un núcleo educativo del barrio Las Américas. Su tía Blanca Montero pidió a los familiares de su padre que residen en Argentina se comuniquen a los celulares 77335798 y 79841683 para sostener contacto con ellos, pues es deseo de Carlos Alberto conocer a la familia de su padre.

Fuente: Red Uno.



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