Fuerzas sirias disparan contra funerales masivos

SIRIA Las fuerzas sirias causaron la muerte de al menos 12 personas el sábado durante los funerales masivos de manifestantes que perdieron la vida a tiros el día anterior en las protestas a favor de la democracia, según la organización siria de derechos humanos Sawasiah.

La organización independiente dijo que las muertes tuvieron lugar en Damasco y zonas cercanas y cerca de la ciudad de Izra’a, en el sur del país.

Dos activistas dijeron el sábado que al menos 100 personas perdieron la vida en las protestas del viernes.



En la localidad, los dolientes cantaban "Bashar al Asad, traidor! Larga vida a Siria, abajo Bashar!", en referencia al presidente, quien lleva 11 años en el poder.

"Hubo una intensa ráfaga de disparos en nuestra dirección mientras nos acercábamos a Izra’a para asistir a los funerales de los mártires", declaró a Reuters un testigo de la ciudad de Derá, en el sur del país.

Los agentes de seguridad también abrieron fuego contra un funeral en el suburbio de Douma en Damasco, dejando a tres personas heridas, señalaron testigos.

Dolientes en Harasta, una localidad cerca de Damasco, también fueron atacados por las fuerzas de seguridad, antes de realizar una protesta en demanda por la liberación de activistas arrestados en las últimas semanas.

Manifestantes realizaron otra protesta después del funeral de cuatro personas en Irbeen, cerca de Damasco.

"No nos iremos hasta que liberen a los prisioneros políticos", declaró por teléfono uno de los activistas.

Un segundo legislador sirio dijo el sábado al canal Al Yazira que renunciaba a su puesto en el Parlamento en protesta por las muertes de los manifestantes.

El legislador Jalil al Rifaei se sumó a su colega Naser al Hariri, ambos representantes de la volátil ciudad de Derá, y anunció su renuncia en directo, diciendo que de este modo expresaba su descontento ante las muertes producidas durante protestas a favor de la democracia.

"Las soluciones con agentes de seguridad no funcionan", indicó Rifaei.

Condenas

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó la violencia del viernes y acusó a Asad de buscar la ayuda de Irán.

"Este atroz uso de la violencia para acabar con las protestas debe llegar a su fin ya", afirmó en un comunicado.

"En lugar de escuchar a su propio pueblo, el presidente Asad está responsabilizando a personas ajenas mientras busca la ayuda iraní para reprimir a los ciudadanos sirios a través de las mismas tácticas brutales que han sido usadas por sus aliados iraníes", declaró el mandatario estadounidense.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia sostuvo que París estaba "profundamente preocupado".

"Las autoridades sirias deben renunciar al uso de la violencia contra sus ciudadanos. Les pedimos de nuevo que se comprometan sin demora con un diálogo político integrador y a aplicar las reformas exigidas de forma legítima por el pueblo sirio", indicó.

Las víctimas de la represión estaban entre las decenas de miles de personas que han salido a las calles de ciudades y zonas rurales de Siria para demandar el fin del régimen, exigencias que se han intensificado en las últimas semanas.

Las protestas del viernes se llevaron a cabo pese a la decisión de Asad esta semana de levantar la aborrecida ley de emergencia del país, en vigor desde que el Partido Baath llegó al poder hace 48 años.

Un comunicado de los Comités de Coordinación Locales dijo que el fin de la ley de emergencia era inútil sin la liberación de miles de prisioneros políticos – la mayoría detenidos sin un juicio – y el desmantelamiento del aparato de seguridad.

La violencia del viernes elevó a unos 300 la cifra de muertos desde que estallaron los disturbios el 18 de marzo en la ciudad de Derá, según activistas de derechos humanos.

Reuters