En el marco de su visita a Buenos Aires, el vicepresidente Álvaro García Linera lanzó la idea de convertir a la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) en un “Estado Plurinacional”.
Durante la inauguración del Centro de Estudios Estratégicos de la Defensa (CEED) de la Unasur, el co-mandatario boliviano dijo que “la dinámica geopolítica y geoeconómica del mundo obliga a construir Estados-Región”, como mecanismo para defenderse de un “imperio decadente, malicioso y cada vez más agresivo”, en alusión a los Estados Unidos.
“Eso implica comenzar a ver al continente latinoamericano, en particular a Unasur, como un Estado Región Plurinacional que cobije a varias naciones”, dijo Qananchiri, término aymara que significa “el que trae la luz”.
Y lo cierto es que con sus declaraciones García Linera termina de sacar a la luz la intención oculta del bloque de la ALBA, que no es otro que el de conformar una estructura estatal supranacional, una suerte de Unión de Repúblicas Socialistas Latinoamericanas, encabezadas -como no podría ser de otra manera- por el pintoresco coronel Chávez.
Esto es lo que en la jerga chavista se denomina el proyecto “Gran-nacional”, que ya da sus primeros pasos por medio de empresas estatales conjuntas y también a través de fuerzas militares binacionales, como la que ya opera en el norte amazónico boliviano.
La idea es debilitar las soberanías nacionales para supeditarlas a un embrionario super-Estado de características socialistoides, especie de réplica tragicómica de la Unión Soviética en tierras latinoamericanas.
A esto apuntaban las cláusulas incluidas en las constituciones pergeñadas en los últimos años en los países del bloque, prefabricadas en serie por el mismo equipo de asesores, en las que se insertó el mandato de la integración política continental.
Queda claro también el verdadero papel de la “plurinacionalidad” establecida en la CPE boliviana, verdadero instrumento de relativización y deconstrucción del Estado-nación como paso previo a la absorción en la estructura trasnacional promovida desde Caracas.
“Proyecto antinacional” sería un término más adecuado para definir la esencia de este despropósito…