Familiares de los detenidos por el caso terrorismo Alberto Melgar y Juan Kudelka fueron a pedir al Congreso de Paraguay solidaridad. Afirman que el presidente Evo Morales convirtió al país en una prisión y que la justicia es una fachada para cometer atropellos contra los derechos humanos.
Familiares de Alberto Melgar y Juan Kudelka piden solidaridad al congreso de Paraguay
Audiencia. Kudelka (c) escucha al juez junto a Requena, su abogada en julio de 2011. Foto archivo La Razón
La Razón Digital / Angel Guarachi
Desde el 22 de octubre, se encuentra detenido preventivamente en el penal de Mocovi del expresidente del Comité Cívico del Beni, Alberto Melgar, presuntamente vinculado en el caso terrorismo, mientras que Juan Kudelka está recluido desde julio de 2011 en el penal de San Pedro, por el mismo proceso.
De acuerdo a un reporte de la página web abc.com.py, Kathy Rabczuk, la novia Juan Kudelka, y Verónica Suárez, abogada de Alberto Melgar llegaron a Asunción.
“Bolivia se convirtió en una prisión. Las leyes se utilizan para perseguir opositores y no hay forma de ejercer el derecho a la defensa”, dijo Verónica Suárez.
La abogada agregó que “Alberto Melgar es uno de los presos políticos del régimen de Evo Morales. No existe ninguna prueba, ningún indicio en su contra. Es más, los demás acusados de un supuesto acto de terrorismo ya fueron sobreseídos, pero él sigue en prisión, en las peores condiciones que se pueda imaginar”.
Kathy Rabczuk, aclaró que no pretenden una intervención en los asuntos internos de Bolivia. “Lo que buscamos es la vigencia del principio universal de los derechos humanos y una de las formas de lograrlo es a través de la solidaridad. En Bolivia no hay forma de tener justicia. En estas condiciones lo único que podemos hacer es pedir ayuda y que no olviden a nuestros presos de conciencia”.
El diputado paraguayo, Enrique Salyn Buzarquis, anunció ayer la presentación ante una comisión, de un pedido de pronunciamiento solidario, en relación a los presos políticos de Bolivia.
Finalmente aseguró que “el compromiso con lo derecho humanos no tiene fronteras”, y dejó abierta la posibilidad de una visita parlamentaria a Bolivia.