Buscando huevitos…

Carlos Meleán*

Melean2 Bueno en la vida real hay muchos que una vez por año se ponen a buscar huevitos de conejo con sabor a chocolate y por el otro lado hay otros que buscan a huevones, que no se enteran de nada, para ver si son perforadoras o perforadas, las palabras, ideas o personas… quién sabe, y estos últimos siempre encuentran a ese tipo de gente por rebaños y así van creando su nueva realidad. El que uno busque huevos de conejo significa que en la vida tenemos la esperanza, la esperanza para lo nuevo, para lo bueno, porque el hombre es por su naturaleza un ser que puede crear amistad, hermandad, justicia, libertad… ¿Pero qué pasa cuando la esperanza muere? ¿O mejor dicho cuando dejan morir o matan a la esperanza? En la mayoría de los casos nosotros la seguimos hasta el final…

A Cristo lo están preparando para crucificarlo, cada año es lo mismo y pasados unos días resucita y se va al cielo dejándonos la esperanza, la idea de que no hay un momento donde el tiempo no existe, dejando la idea de lo que significa infinito, que la vida es un ir y venir, que nosotros somos pasajeros pero en ese corto tiempo por estos lados, podemos hacer algo por nosotros, por nuestra sociedad, por la naturaleza… que podemos sembrar amor para cosechar amor… Y luego salen otros que dicen: pascuas no hemos de festejar y otros dicen “ah que lindo feriado vamos a farrillear, a meter manito”, porque eso del infierno y los dioses no hay…



Ok. Las creencias no son ni matemática ni física, pero en una sociedad PLURI… ¿por qué tenemos que empezar de arriba para abajo a definir lo que son las buenas creencias y lo que son las malas? Pluri significa diversidad de todo, de color de piel, de peinados, olores, sudores, pensamientos, sentimientos, y creencias y mientras yo crea en lo que me dé la gana y con mis creencias no cree ni violencia, ni terror, ni anarquía, o cualquier pendejada que dañe a la gente, ¿por qué no puedo creer? ¿Por qué para creer tengo primero que demostrar que mi creencia es ancestral? ¿Para estar bien con Dios, con el Diablo o con el que me gobierna? ¿Y quién define a que Dios tengo que creer o cuál es el actual Diablo?

Y si hubiéramos puesto atención a lo que nos dijo el conejo de la pascua, deberíamos haber entendido de que no tenemos que cuidarnos de la ira del paraíso o la violencia del infierno, porque nosotros vivimos ahora en el presente, y en este presente nos sirven en bandeja de oro un infierno multicolor, tan bien envuelto que no lo vemos, que no queremos ver y ¿será por eso que nos dan los huevos de chocolate? ¿O de vez en cuando un rodillazo o quizás una palmadita en el culito? Claro más les conviene que no pensemos en temas del más allá, porque esos temas son del enemigo, del capitalista… de ese que de la mente nos roba el patriotismo, el sentido originario con el que nacimos hace siglos…

Y ahí volvemos al principio, a ese principio donde nacen cosas de una simple creencia… un hombre y una mujer salen del Lago Sagrado… y crean la vida…. Y esa creencia es sagrada como lo es la cruz y si vamos por ese camino, nos enteramos de la palabra Respeto y si existe el respeto, entonces dejo que la gente crea en lo que quiera y mientras no me jodan con sus creencias, pues andamos por el buen camino…

Pero cuando las creencias, crean fanatismo, crean rivalidades, crean odio, crean violencia y matan, entonces llegó en momento de ponerles un punto final y no por el medio de las armas, sino por el camino de la confrontación verbal, por el intercambio de ideas, pensamientos, argumentos… pero lastimosamente estamos muy lejos de ese entendimiento, porque ahora llegó el momento de hacer caza al conejo de la pascua, porque ese conejo no es de estas tierras… Y así salimos a buscar a un enemigo abstracto, figurativo…

Más de 2000 años que ese conejo va y viene trayéndonos la esperanza, dándonos la posibilidad para ponernos a pensar en lo que realmente es nuestra vida… Cristo vino y luego se fue y el mensaje es el mismo, la esperanza, esa semilla que al brotar trae hombres nuevos, diferentes… pero en este tipo de hombres nadie tiene interés, porque con ellos los sistemas actuales no tendrían futuro…

*Hamburgo, Alemania