Diego Paesano: » Todo modelo tiene que ser actor «

paesanoHace 12 años dejó San Ignacio y llegó a Santa Cruz de la Sierra con una maleta llena de sueños.

Poco a poco logró hacer realidad sus tres proyectos teatrales: El varón escarnecido, El mago de Oz y Drácula, y sorprendió al público gracias a su trabajo prolijo. Sin exagerar, logró volcar taquilla en reiteradas veces. Ahora apunta al modelaje y al cine.

Nos acercamos a Diego Paesano no para preguntarle acerca de su carrera como actor, sino para conocer al otro Diego, ese que acaba de hacer un desnudo para su ‘book’ (álbum de fotos), que gusta del modelaje y repudia los programas de farándula.



– ¿Qué significa para vos el modelaje?

-El modelaje siempre me atrajo, siempre quise ser modelo y creo que forma parte de mi carrera. Todo modelo tiene que saber algo de actuación.

– ¿Ahora solo te interesa ser modelo?

– Lo que pasa es que hay prioridades. Cualquier trabajo de modelaje que aparezca va a ser bienvenido, pero sobre todo soy actor.

– Dicen que cuando hacés un desnudo es porque tenés ciertos atributos para mostrar en público. Vos hiciste uno para tu álbum de fotos…

– (Risas) No sé… muchas amigas me dijeron que soy sexi, pero nunca me nombraron alguna parte específica de mi cuerpo que les guste.

– ¿Y te la creés que sos sexi?

– ¡Sí! Prefiero creérmela porque todo está en la cabeza. Si pienso que soy un chico feo, todo el mundo va a pensar eso, pero si digo que soy un chico lindo, todos lo van a decir así. El poder de nuestra mente es tan grande, que todo depende de lo que creamos.

– ¿Cómo es tu chica ideal?

– Primero tiene que comprender mi profesión y después busco que sea una mujer elegante y sexi. Que ella me enamore a mí y no yo a ella.

– ¿Tenés algo de metrosexual?

– Sí, porque soy actor. Voy al gimnasio y uso crema hidratante.

– ¿Te considerás un hombre irresistible?

– ¿Como hombre? (Risas). Trato de tener mis encantos.

– ¿Cuál es el mejor piropo que te dijeron?

– ¡Ah! (Risas). Una vez, en un boliche, una mujer se me acercó y me dijo: “¡No podés ser tan perfecto!”. Me agarró las nalgas y me levantó la sudadera. Ella quería saber si lo que se imaginaba era real. ¡Me hizo sentir muy bien! Fue algo tan rápido que no me dio tiempo para reaccionar. En otra ocasión, subí una fotografía con mi perro al Facebook y una amiga escribió: “¡Qué animalote más hermoso y el perrito se ve tiernito!”.

– ¿Cuál es la diferencia entre un actor y un modelo?

– Todo modelo tiene que ser actor. La diferencia es que un modelo tiene que actuar para vender un producto y el actor, para vender una historia.

– ¿Qué opinás de los programas de farándula?

– Por una parte, estos programas juegan muy sucio, pero por otra hay que entender que es parte de su trabajo. Me gustaría que tengan un poco más de ética, porque a pesar de todo son comunicadores.

– ¿Qué opinás cuando a los modelos les dicen que son gais?

– No solo a los modelos, también a los cantantes y danzarines. Cuando a un artista le dicen gay, que se ponga contento, porque está empezando a tener éxito y fama. El artista, para ser artista, tiene que tener cierta sensibilidad para interpretar cualquier papel, no es una persona convencional, entonces esa sensibilidad nos hace diferentes. En nuestro medio decimos que un actor tiene que ser tanto tierra como aire.

– Sé que vos escribís, actúas y dirigís tus obras teatrales…

– Es algo que mucha gente me critica. Yo solo dirijo lo que escribo. Todo tiene su pro y su contra, pero si Mel Gibson y Clint Eastwood lo hacen, ¿por qué yo no lo voy a hacer?

– ¿Cuáles son tus planes como actor?

– Busco consagrarme como actor de teatro a escala nacional e internacional y ser reconocido hasta en el cine.

SU PERFIL

Diego Paesano Justiniano nació el 7 de junio de 1983 en San Ignacio de Velasco y es graduado de Comunicación Audiovisual de Diakonía.

En 2002 hizo un curso de modelaje, etiqueta y protocolo en la escuela John Casablancas Center. Seis años después egresó con honores en Artes Escénicas de la Escuela Nacional de Teatro.

Dictó el taller Caracterización y Efectos Especiales en Diakonía y también realizó locuciones y doblajes para una veintena de publicidades para empresas como Tigo, Sofía y la UPSA.

En 2008 presentó su primera obra, El varón escarnecido, y estuvo a cargo del guion, la dirección, la producción y la actuación. Un año después actuó en la película Rojo Amarillo Verde, de Rodrigo Bellott.

En 2010 adaptó El mago de Oz y en 2011, Drácula. Desde hace cinco años es director general y artístico de Alquimia Producciones, su propia empresa.

Fuente: www.eldeber.com