Apuntes para una estrategia de la oposición

Ismael Schabib Montero*SCHABIBPensando en las elecciones generales del 2014, desde la situación actual que se vive en Bolivia en el aspecto político, no es imaginable un evento de esta naturaleza donde prevalezca una práctica democrática autentica; un fraude que cumpla los objetivos del partido de gobierno es fácilmente predecible. Una elección limpia y transparente resulta una utopía porque el descaro de los mandantes para hacer lo que les conviene, no tiene límites.Si el MAS tiene la voluntad, la intencionalidad y el poder absoluto para perpetuarse ilegal e ilegítimamente en el poder ¿Qué debe hacer la oposición? Poner en evidencia al Sr. Morales, y su gobierno, mostrarlo tal cual es, una persona inculta, corrupta que hizo carrera política defendiendo a sangre, fuego y bloqueos la coca ilegal con la que se produce cocaína, que tiene las manos manchadas con sangre de militares y policías, además de las fechorías de su gobierno. Con los resultados del censo nacional hacerle ver al votante paceño que la intolerancia política del MAS perjudica a ese Departamento. (Por primera vez en los últimos cien años, el Dpto. de La Paz aparece como uno de los cuatro departamentos con menor crecimiento poblacional).No se puede recurrir a ninguna instancia imparcial dentro del país, lo único que queda es la denuncia internacional sobre la situación de la democracia, la administración de justicia, la corrupción y el narcotráfico; argumentando sólo la verdad. Solicitar ayuda económica y tecnológica, para descifrar el sistema fraudulento de los medios cibernéticos del Órgano Electoral. Convencer a la comunidad democrática internacional que repetir la experiencia de Venezuela es demostrar una indiferencia total con la suerte de la paz y la democracia en esta región.En lo interno, la unidad de la oposición es vital. Pero no sólo para aglutinar los votos, se debe hacer que la mayor debilidad del oficialismo es su candidato, porque ética y moralmente está descalificado. Hacer ver que cualquier ciudadano culto y honesto es preferible que el Sr. Morales en la presidencia del país. Entender que no vivimos tiempos “normales” de democracia, hay que buscar un candidato que inspire confianza, que esté dispuesto a jugarse en el peor escenario político mostrando coraje y capacidad. La oposición puede demostrar con hechos, los errores del gobierno del Sr. Morales. No se necesita insultarlo, sólo decir la verdad. Insultarlo es hacerlo crecer, victimizarlo. Decir la verdad demostrable no es hacer guerra sucia, se lo hace hasta en EEUU para evitar que un delincuente solapado se apodere del gobierno. La oposición organizada debe lograr que cada ciudadano convenza por lo menos a uno que no haya decidido su voto. Una “victoria” del gobierno con fraude no debe ser considerada como tal.En este escenario, la oposición debe ganar las elecciones, en la medida que la diferencia sea más grande mejor y reclamarla con todas las fuerzas de su corazón. Así se tenga la seguridad que el gobierno hará lo imposible para no soltar el poder; esa debe ser la razón que impulse a la victoria indestructible. Ganar las elecciones debe ser el objetivo imprescindible para actuar en cualquier situación futura.Perder las elecciones, realmente, será el peor escenario posible, porque el primer efecto sería auto convencernos que a pesar de todo, el pueblo lo quiere al Sr. Morales, con todas las consecuencias futuras como su permanencia indefinida en el poder con cero democracia.*Vicealmirante de la República de Bolivia