Conflicto por el poder. Hubo vigilia toda la jornada y al caer la tarde se produjo una reyerta y la peor parte se la llevó la alcaldesa Jenny Fernández, con un embarazo de siete meses. El Concejo apoya al alcalde Rolando Romero.
Alcaldesa de La Guardia, en la clínica tras enfrentamiento
Jenny Fernández fue sacada en brazos de la alcaldía guardeña. Foto El Deber.
El Deber, Santa Cruz, Bolivia
Una jornada con riñas ocasionales, con golpeados y hasta un herido (no oficial) acabó al caer la tarde con un enfrentamiento entre seguidores de los dos alcaldes que tiene La Guardia, Jenny Fernández y Rolando Romero. La peor parte se la llevó la alcaldesa Fernández, que al intentar salir caminando de la Alcaldía fue agredida salvajemente por seguidores de Romero. La acción contra la mujer, que tiene un embarazo de siete meses, desató la intervención de policías que están de guardia desde la noche del lunes en el edificio comunal.
La situación conflictiva que se origina en el cumplimiento de un fallo del Tribunal Constitucional a favor de la alcaldesa Fernández comenzó cuando el lunes, con apoyo de la fuerza pública, ella ingresó en el despacho del ejecutivo municipal. No hubo reacción de los seguidores de Romero hasta ayer cuando iniciaron una vigilia en contra del regreso de la nueva autoridad. Pero Fernández estaba adentro revisando documentación con una notaria de fe pública.
La misma noche del lunes, el Concejo Municipal sesionó y ratificó a Romero como alcalde y al mismo tiempo desconoció a Fernández, a la que no se le reconoce ni siquiera el derecho a un curul en el organismo deliberante, según la declaración de su titular, Mario Subirana.
La agresión a Fernández se produjo luego de que esta sufrió un desvanecimiento en el interior del edificio comunal. Al ser sacada del inmueble, un individuo le propinó un palazo en la cabeza. Fue entonces que sus seguidores corrieron a la gente de Romero a punta de cohetazos y ello originó la intervención de la Policía, que hizo uso indiscriminado de gases lacrimógenos para dispersar a los dos bandos.
La mujer fue subida en una moto para sacarla del lugar, pero el intento no prosperó porque los ánimos estaban caldeados y nadie respetaba a nadie, de manera que el transporte de Fernández tuvo que retornar en medio de la explosión y el humo de cohetes y gases y una lluvia de piedras y palos. La autoridad debió ser ingresada para protegerla en el comando policial guardieño, lugar en el que permaneció más de una hora para de ahí ser trasladada a la clínica Copacabana donde anoche era sometida a exámenes diversos con el fin de evidenciar su estado de salud y, sobre todo, prevenir algún daño al bebé en gestación. No se brindó un informe médico.
Concejo
El presidente del Concejo, Mario Subirana, declaró que en La Guardia “solo hay un alcalde, Rolando Romero. Nosotros estamos cumpliendo el fallo al anular dos resoluciones y Fernández no tiene nada que hacer en el gobierno municipal. No la reconocemos ni como alcaldesa ni como concejala”, apuntó y luego se estrelló contra la diputada Betty Tejada por expresar su apoyo a Fernández. La acusó se traicionar el proceso de cambio en el país.
Acoso
A su vez, la legisladora Betty Tejada, que ejerce la presidencia de la Cámara de Diputados, lamentó la situación y sostuvo que no se trata de apoyar o rechazar a alguien, sino de respetar las leyes y los fallos del máximo tribunal de justicia del país. “Hace días hemos debatido un fallo (sobre la relección presidencial) y todos coincidimos en que quien considera vulnerados sus derechos tiene adonde recurrir y en este caso de La Guardia hay un fallo que favorece a Fernández”.
Dijo que el problema de la alcaldesa alcanza a la ley sobre acoso político y que la Cámara recurrirá, en su caso, a las instancias pertinentes para que sus derechos no se vulneren.
Denuncia
Ante la imposibilidad de dialogar con la alcaldesa (internada), su abogado, Mauricio García, denunció agresiones de parte de la gente de Romero y dijo haber sido víctima de un sujeto que intentó clavarle un cuchillo. También señaló que fue herido con arma blanca un dirigente de una OTB que tiene 15 días de impedimento.
Sobre la agresión a la alcaldesa, afirmó que harán la denuncia por intento de asesinato, pues el autor de los golpes fue identificado y se vio que aprovechó el estado de seminconsciencia de la ‘víctima’ para propinarle un palazo en la cabeza. “El intento fue con saña, alevosía y premeditación y haremos la denuncia en ese sentido, sin tomar en cuenta aún que se ha puesto en riesgo la vida de su bebé en gestación”, advirtió. Hizo notar que la Policía ha actuado con mucha pasividad y hasta con cierto afán de proteger a quienes están impidiendo el cumplimiento de un fallo constitucional.
Situación
Después del incidente, que no duró más de 20 minutos, volvió la calma, o al menos el silencio, pero la vigilia se mantiene. Según fuentes policiales, la custodia seguirá, pues se trata de hacer cumplir un fallo judicial
DATOS
1 En 2006 la comuna guardieña fue calificada como municipio escuela por la estabilidad política y administrativa y por el desarrollo alcanzado.
2 En abril de 2012, el Concejo Municipal sustituye al alcalde Jorge Morales y en su lugar designa a Jenny Fernández (MAS) que ejerció el cargo hasta mediados de junio.
3 Fernández es sustituida por Jaime Cabrera, también del MAS, que se desempeñó hasta mediados del mes de noviembre cuando fue cambiado por Rolando Romero.
4 Romero, con apoyo del presidente del Concejo, Mario Subirana, se desempeñó normalmente hasta finales de 2012, cuando Jenny Fernández obtuvo un fallo constitucional para ser restituida.
Masistas se enfrentan por la Alcaldía de La Guardia
Línea de Rolando Romero rechaza retorno de Jenny Fernández. Conflictos. La alcaldesa interina ingresó a su despacho oficialmente con resguardo policial. Medios de comunicación fueron agredidos por protestantes.
EL DÍA
Ref. Fotografia: Enfrentamientos. Hubo en tensión en el municipio en la mañana y en la noche, cuando salía Jenny Fernández.
Dos bandos del Movimiento Al Socialismo (MAS) se enfrentaron ayer por la toma del poder de la Alcaldía de La Guardia. Unos en apoyo a la alcaldesa interina restituida, Jenny Fernández, y otros a favor del exalcalde interino, Rolando Romero, ambos de la misma tienda política.
El regreso de Fernández a la Alcaldía, el lunes por la noche, desató la molestia de los seguidores de Romero, quienes a tempranas horas de ayer llegaron hasta el edificio municipal para intentar ingresar y sacar a Fernández.
Sin embargo, al verse imposibilitados de ingresar instalaron una vigilia en los alrededores de la Alcaldía, lugar hasta donde llegaron las personas que apoyaban a Jenny y se enfrentaron a ellas para intentar dispersarlas.
La carretera se convirtió en un campo de batalla campal a la llegada de ambos bandos, que utilizaron palos, piedras, cohetes, asientos, botellas y otros objetos para defenderse.
Una de las personas que apoyaba a Jenny Fernández resultó herida en el brazo con un arma cortopunzante y golpes en la cabeza con un asiento del mercado municipal del lugar.
Sin embargo, un mismo panorama se repitió por la noche, cuando llegaron decenas de policías para resguardar la salida de Fernández, lo que obligó que la fuerza pública haga uso de gases lacrimógenos para dispersar a la gente de los alrededores del municipio.
Procesos legales. En tanto, la alcaldesa restituida, quien fuera suspendida del cargo por sus propios colegas concejales, ingresó oficialmente a la Alcaldía junto a una notaria de Fe Pública, con quien realizó el inventario de las oficinas. Aseguró que continuará en sus funciones, pese a las amenazas recibidas. "La Alcaldía va a tener las puertas abiertas, tenemos que darle un proceso de cambio verdadero", dijo Fernández, a tiempo de pedir coordinación con las autoridades de esta localidad para un mejor progreso del municipio.
Fernández retomó el cargo gracias a un fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), que la benefició.
Sin embargo, el asesor legal del Municipio, Enrique Luna, indicó que en una sesión extraordinaria efectuada la noche del lunes, los concejales resolvieron una nueva suspensión de Fernández y que por tal motivo ella no podía ejercer funciones de alcaldesa.
Por su parte, Jorge Morales, en la capital negó tener algún vínculo o alianza con Fernández; al contrario, lamentó que lo que anteriormente se llamó municipio modelo en el país, ahora se vea envuelto en una serie de conflictos internos entre autoridades del MAS.
Morales aseguró que no volverá a la Alcaldía, por temor a represalias políticas, como persecución.
Agresión a la prensa. Una vez más los medios de comunicación, como ya es costumbre en este municipio, fueron el blanco de las agresiones verbales y físicas por parte de los seguidores de Romero.
Periodistas, fotógrafos y camarógrafos recibieron empujones al intentar ingresar a la Alcaldía, inclusive el equipo móvil de la Red ATB tuvo que salir del lugar, porque fue amenazado.
El abogado defensor de la alcaldesa restituida, Mauricio García, quien salió de la Alcaldía por la puerta trasera, también fue agredido con palo, aunque logró salvarse con la llegada de efectivos policiales.
Hasta el cierre de edición, la Alcaldía quedó resguardada por dentro por la Policía y en las afueras por los seguidores de Romero, quienes anunciaron que hoy no permitirán el ingreso de Fernández.
No hay ley ni Estado; hay una anomia
Iván Arias / Analista.
Más allá de los detalles que originan el conflicto municipal que se viene registrando en el otrora municipio modelo de La Guardia, hay que considerar que lo mismo sucede en otras comunas de distintos distritos del país, donde las pugnas y los intereses personales o de grupo están prevaleciendo sobre cualquier buena intención o sobre el interés colectivo. Lamentablemente, hemos llegado a una situación en la que el concepto de lo que es la política está siendo interpretado por muchos como la manera de enriquecerse fácilmente. En la forma de echar mano de la cosa pública sin tener que responder a nadie y sin que importen los medios para alcanzar este ilegal objetivo. Lo importante para muchos es asaltar la cosa pública.
Sobre los fallos del Tribunal Constitucional, se ha llegado al extremo de que nadie los acata o cada quien los interpreta de acuerdo con su conveniencia, producto de una serie de desaciertos que se han venido dando en distintos fallos dictados en diferentes casos de manera que peligrosamente estamos entrando a vivir en una situación de anomia, donde no existen las leyes, donde nadie las cumple y tampoco las respeta. Estamos viviendo una situación donde no hay Estado. Cada uno cree que tiene su propio feudo y si no tiene lo arma en todos los niveles. Atravesamos una situación peligrosa que puede derivar en una serie de consecuencias muy negativas para el país, que necesita de una buena administración de sus recursos para poder aspirar a un verdadero desarrollo.
Lo ideal es respetar las leyes y que se respeten los derechos de todos. (El Deber)