La espía del Gobierno que penetró la marcha indígena, ahora desapareció

Policía infiltrada se metió a planificar la marcha en Yucumo. Ahora desapareció de Bulo Bulo tras destape. La cabo Angélica Cáceres se marchó el jueves 11 de su puesto de Policía antinarcóticos de Chapare. Esperan su retorno, pero no saben de su paradero. Garras del valor adiestró a Cáceres.

La espía penetró la marcha en Yucumo y oyó la planificación

NUEVAS REVELACIONES DEL CASO CHAPARINA. Aparecen más fotos en las que se ve a la cabo Dayana Cáceres en las reuniones de planeación de la octava marcha indígena.

Almaraz y Olivera creen que la cabo Cáceres siguió a los activistas desde La Paz y que estuvo en la organización del apoyo. Nuevas fotos lo confirman.



image Entre Almaraz, Villca y Olivera, apoyada en una vagoneta, allí se ubica a la agente policial infiltrada. Foto: Jaime Zapata.

EL DEBER, Santa Cruz, Bolivia

Nadie la notó, pero el 21 de septiembre de 2011, la cabo de Policía Angélica Dayana Cáceres Ramírez siguió a los activistas en defensa del Tipnis de La Paz a Chaparina. Se mimetizó entre ellos en Yucumo al día siguiente, desayunó con el exviceministro Alejandro Almaraz, Lino Villca y Óscar Olivera, y estuvo en la planificación de la estrategia de apoyo a la octava marcha, que estaba cercada en Chaparina por la Policía. Así lo ha revelado ayer el testimonio de tres activistas que estuvieron allí ese día y un juego de fotografías tomadas por ellos.

“Tuvo que salir de La Paz con nosotros, organizamos todo muy rápido y no nos conocíamos entre todos los activistas. Ella debió infiltrarse ahí y apareció en Yucumo”, asegura Almaraz. “Íbamos en un par de vehículos y algunos en una flota. Estoy convencido de que ella (la cabo Cáceres) se sumó como activista en la flota. Lo grave es que la agente escuchó toda nuestra planificación en Yucumo”, recuerda Olivera. “Como la convocatoria fue abierta para ingresar a reforzar la octava marcha, me pareció normal no conocer a algunas personas”, dice un tercero, que ha pedido se cuide su identidad.

Lo cierto es que las nuevas fotografías y testimonios dan cuenta de que el 22 de septiembre, de Yucumo a Chaparina y hasta el día de la represión, la cabo Cáceres consiguió quedarse en la marcha indígena, en un escenario marcado por un cerco policial y por un bloqueo de campesinos en Yucumo.

Burló controles

Olivera recuerda que la guardia indígena era rigurosa y que los activistas llegados con él de Cochabamba y La Paz tenían aval de centrales indígenas, pero que hubo casos de expulsión por falta de respaldo. “Por lo que veo esa agente de Inteligencia burló el control de la seguridad interna”, relata el activista. Los nuevos indicios deben investigarse 

Indígenas piden un informe policial

Los dirigentes originarios Fernando Vargas y Pedro Nuni, tras conocer las nuevas revelaciones sobre la infiltración, han reclamado al Comando Nacional de la Policía que remita un informe oficial que explique estos datos y los documentos que desvelan la participación de la cabo Cáceres en la octava marcha indígena.

“El comandante Aracena dijo que había instruido una investigación a la inspectoría policial hace una semana; bueno, él debe incluir estos nuevos datos y debe entregar el informe ya”, demandó Nuni, uno de los dirigentes que fue reprimido en dicha movilización. Se espera el pronunciamiento.

“Desayunó con nosotros en Yucumo; sabía todo”

Óscar Olivera/ – Activista –

Todo comienza a tener sentido para Óscar Olivera, activista cochabambino de apoyo a la octava marcha (2011). Las fotos reveladas ayer, para él, muestran que el Gobierno espió a su organización todo el tiempo. 

¿Qué le dicen las nuevas fotos de la infiltración de la cabo Cáceres?

Esa foto para mí es clave. Cuando llegamos de La Paz a Yucumo y nos hicieron bajar los policías, tuvimos que ir a pie a un local del pueblo donde desayunamos y planificamos la estrategia de apoyo. Las fotos revelan que ella oyó todo.

¿Qué oyó ella?

Nuestra estrategia de apoyo para la marcha indígena.

¿Ella vino con ustedes?

Íbamos en un par de vehículos y algunos en una flota. Estoy convencido de que ella (la cabo Cáceres) se sumó como activista en la flota. Lo grave es que la agente escuchó toda nuestra planificación. 

¿La recuerda usted?

No, no la recuerdo. Nosotros teníamos el aval de la OICH, ella no sé de quién tendría respaldo. Burló los controles 

La infiltrada desapareció de Bulo Bulo tras destape

BUSCANDO A LA CABO CÁCERES. Fuentes oficiales informaron de que la cabo Angélica Cáceres se marchó el jueves 11 de su puesto de Policía antinarcóticos de Chapare. Esperan su retorno, pero no saben de su paradero.

imageAlgunos de los policías antinarcóticos de esta tranca recordaron ayer a su compañera. Foto El Deber.

Chapare, EL DEBER

La cabo Angélica Cáceres hizo maletas y dejó Bulo Bulo (Cochabamba), donde cumplía sus servicios como inspectora de sustancias controladas. Ocurrió el mismo día en que se publicó la noticia de que ella estuvo infiltrada en la octava marcha indígena en defensa del Tipnis, en Chaparina (Beni), y que participó del supuesto secuestro del canciller David Choquehuanca, el 24 de septiembre de 2011.

Fuentes oficiales confirmaron a EL DEBER que Cáceres cumplía funciones como policía antinarcóticos en Bulo Bulo (a 180 km al norte de Santa Cruz) y que pertenece a la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar), acantonada en Chimoré.

Camarada Cáceres

“El jueves la vi alistar su ropa y comentar a otros colegas que había sido cambiada de destino. Quedé sorprendido porque no había contado a nadie que tenía intenciones de irse. Horas después nos enteramos por los medios de comunicación que la cabo Cáceres estaba señalada en el caso Chaparina”, dijo un compañero de ella en Bulo Bulo.

El camarada de Cáceres también relató que la llamó a su teléfono móvil para brindarle su apoyo en este momento que, al estar en el ‘ojo’ de la tormenta, puede ser muy duro para ella, pero dijo que su número de celular está como apagado, como si ya no estuviera habilitado. “Desapareció de la noche a la mañana. Es como que si se la hubiera tragado la tierra. Lo único que sabemos es que fue enviada a otro destino, pero no sabemos dónde”.

Otros dos policías dijeron que no sabían si la policía antinarcóticos más famosa de Bolivia estaba en La Paz o en otro punto de Chimoré. “Las órdenes llegan de arriba y los compañeros no nos enteramos”, coincidieron.

Una alta fuente de Umopar reveló que la cabo Cáceres pidió un permiso reglamentario de trabajo el jueves 11. “Está estipulado que un efectivo, debido al estrés por el trabajo que realiza, puede pedir trimestralmente un permiso de descanso por un tiempo de 10 días”, dijo la fuente, y afirmó que ellos mismos, en Umopar, no saben dónde se encuentra. “Puede que esté en su casa, no lo sabemos”, dijo, y recordó que el domingo o lunes debería estar de vuelta, puesto que él no tiene ninguna información sobre un cambio de destino o pedido de traslado.

Cabe recordar que un grupo de activistas que defienden el Tipnis denunció que el Gobierno infiltró a una policía en la octava marcha indígena y que fue Cáceres quien agredió al canciller, y no los indígenas como se decía.

En Bulo Bulo cuentan que Cáceres era muy buena profesional, eficaz en sus labores antinarcóticos y que no la conocieron mucho porque estaba desde hace aproximadamente dos meses y que no había llegado al trimestre, que es el tiempo promedio de un efectivo en una labor establecida en Chapare.

Aquí, en la tranca de Bulo Bulo hay policías que señalan que mientras estuvo ella nunca habló del caso Chaparina y que para muchos fue una sorpresa ver su fotografía en los periódicos y en la televisión. Todos la buscan

Lo que  se reveló   

La pista, su cuenta de Facebook

La cuenta de la cabo Cáceres dio la pauta donde ubicarla.

Estudió en la UMSA

Otro dato tomado de su cuenta dice que estudió en La Paz.

La cuenta fue eliminada

Desde ayer, la cuenta de Angélica Cáceres desapareció.

¿Vive en La Paz?

Según su red social, ella  reside en la sede de Gobierno.

UN INFORME POLICIAL

Se aguarda un reporte oficial que explique su situación.

Encubierta en la marcha

Cáceres se infiltró como una activista universitaria en 2011.

Garras del valor adiestró a Cáceres

Al interior de centro de entrenamiento antinarcóticos Garras del Valor también hablan de la cabo Angélica Cáceres. “Ella estuvo aquí”.  

“Recibió instrucciones especiales para luchar contra el tráfico de drogas y de sustancias controladas”, dice un efectivo que el martes caminaba por las inmediaciones de esa institución, que se encuentra entre Chimoré y Shinaota.

Cáceres estuvo en Garras del Valor hace aproximadamente dos meses, dijo el mismo uniformado. Pero ese dato no fue confirmado por Umopar Chimoré, al que la cabo pertenece.

Pero fue ella misma quien en su página del Facebook: Angélica Dayana Cáceres Ramírez, informaba que había sido capacitada en esa institución. Pero quienes quieran mandarle una solicitud de amistad ya no podrán hacerlo, porque no aparece en la red social más popular del mundo.

En Chimoré y en Bulo Bulo no es fácil abordar el tema de la cabo Cáceres. Así como se encontró a policías que hablaron sobre ella, hubo otros que se quedaron ‘mudos’ cuando escucharon su nombre.