Crisis del producto obliga al Gobierno de Evo Morales e industriales a importar trigo desde EEUU, con el fin de molerlo en el país y así abastecer de harina al mercado interno.
Gobierno e industriales traerán trigo para harina desde EEUU
Llegarán aproximadamente 10.000 toneladas hasta fin de mes.
Precio. Los comerciantes importaron 10.000 quintales de harina peruana; este insumo básico del pan llegará la próxima semana y se proyecta vender a Bs 260 el quintal.
Página Siete / La Paz
Foto: Comerciante ofrece harina en la calle Gallardo, en La Paz.
El Gobierno y algunos industriales molineros decidieron importar trigo desde EEUU, con el fin de molerlo en el país y así abastecer de harina al mercado interno.
Paralelamente, los comerciantes internarán 10.000 quintales de harina desde Perú.
El gerente de la Asociación de Industriales Molineros (ADIM), Juan Tórrez, dijo ayer que algunos industriales molineros comprarán aproximadamente 5.000 toneladas de trigo de EEUU.
El viceministro de Comercio Interno y Exportaciones, Luis Fernando Baudoin, informó ayer a Página Siete que el Gobierno importa el grano de EEUU desde el Golfo de México y se prevé que llegará a fin de mes.
“Estamos importando trigo del Golfo de México, en una determinada cantidad, que vamos a moler en el país para producir 90.000 quintales de harina”, afirmó la autoridad.
Se calcula que para procesar este volumen de harina se precisan 4.500 toneladas de trigo.
Sin embargo, el secretario general de la Confederación de Gremiales de Bolivia, Ernesto Rada, dijo que el Gobierno prevé importar unas 30.000 toneladas de trigo desde EEUU.
“Nosotros ya hemos comprado 10.000 quintales de harina peruana, que llegarán a mediados de la próxima semana. También nos hemos enterado de que el Gobierno está importando unas 30.000 toneladas de trigo”, precisó.
El dirigente explicó que el precio del quintal de harina peruana -la bolsa de 50 kilos- oscila entre 220 y 230 bolivianos y será comercializado en el mercado interno en 260 bolivianos.
En junio, el gabinete ministerial aprobó el Decreto Supremo 1608, que dispone la libre importación, es decir, sin pago de aranceles, de trigo y harina, desde EEUU durante 180 días.
La medida obedeció a que desde mayo el precio del quintal de harina se incrementó de 215 a 240 bolivianos en los mercados del país.
Sin embargo, desde mediados de junio, el precio nuevamente reportó un alza hasta 325 bolivianos por quintal.
El aumento se dio como consecuencia del descenso de la producción de trigo en Argentina, de 15 a 11 millones de toneladas.
Además, la Secretaría de Comercio del vecino país aplica desde el 5 de julio la Ley de Abastecimiento de Trigo, que restringe las exportaciones de ese grano y de la harina, con el fin de frenar el alza del pan y de otros derivados. Argentina es el principal abastecedor de este insumo básico en Bolivia.
Los panaderos afirman, para graficar la importancia de este producto, que la mitad de cada pan se hace, en territorio boliviano, con harina argentina.