Retorno del jesuita

Humberto Vacaflor Ganamhumberto-vacaflorLa llegada del jesuita Papa Francisco a Sudamérica sacude las páginas de la historia y muestra la enorme capacidad de la Iglesia católica de renovarse.Alguna vez le pregunté a un amigo jesuita y periodista qué hubiera pasado en nuestros países si no hubiera sido expulsada la Compañía de Jesús por el rey Carlos III en 1767. Con su silencio aprendí que los jesuitas no hacen ese tipo de ejercicios.Los monarcas no tienen buenos administradores, ni entonces ni ahora. En aquel año hubo escasez en España y se disparó el precio del pan, lo que provocó protestas. Como todo gobierno malo, la corona optó por mostrar no su capacidad de gestión sino de castigar.El 2 de abril se dicta la «Pragmática sanción de su Magestad en fuerza de ley para el estrañamiento de estos Reynos a los Regulares de la Compañía, ocupación de sus Temporalidades, y prohibición de su restablecimiento en tiempo alguno, con las demás prevenciones que expresa».El texto de la “pragmática sanción” es exquisito: “usando de la suprema autoridad económica que el Todopoderoso ha depositado en mis manos para la protección de mis vasallos y respeto de mi Corona: he venido en mandar que se extrañen de todos mis dominios de España e Indias, Islas Filipinas y demás adyacentes, a los Religiosos de la Compañía, así Sacerdotes, como Coadjutores o Legos que hayan hecho la primera profesión, y a los Novicios que quisieran seguirles; y que se ocupen todas las Temporalidades de la Compañía en mis Dominios;”Todos debían obedecer: “Y quiero que no sólo las Justicias y Tribunales Superiores de esos Reinos ejecuten puntualmente vuestros mandatos, sino que los mismos se entiendan con los que dirigiereis a los Virreyes, Presidentes, Audiencias, Gobernadores, Corregidores, Alcaldes Mayores y otras cualesquiera Justicias de aquellos Reinos y Provincias;”La real indignación: “y que en virtud de sus requerimientos cualesquiera tropa, milicia o paisanaje den el auxilio necesario sin retardo ni tergiversación alguna, so pena de caer el que fuere omiso en mi Real indignación”.Eso de “la prohibición de su restablecimiento en tiempo alguno” no se cumplió. La orden fue autorizada nuevamente por Pio VII en 1814.Y ahora está en Brasil el primer papa jesuita de la historia. Nació en Argentina. Tiene —cuándo no— apellido italiano.Estamos en el siglo XXI: tiene 2.992.667 seguidores en el twitter.