El obispo de Pando dijo que siguen aumentando los presos en Palmasola (Santa Cruz).
LOS TIEMPOS
Javier Aramayo designado ayer como nuevo Director Nacional de Régimen Penitenciario. – Apg Agencia
De la agenda de 100 puntos que los representantes del Gobierno nacional, gobernaciones departamentales y alcaldías firmaron hace dos meses en Santa Cruz, con el fin de mejorar y resolver los problemas del sistema carcelario del país, “casi nada se ha cumplido, hasta la fecha no se ha modificado nada”, aseguró ayer el responsable de la Pastoral Penitenciaria de la Conferencia Episcopal de Bolivia, Eugenio Coter.
“En Palmasola siguen aumentado los presos, sigue llegando gente, han alcanzado en este momento a 5.600 presos que están en esta estructura, en este sentido no hay grandes avances, no hay prácticamente nada”, reiteró el obispo de Pando.
En septiembre pasado, después de la masacre en Palmasola, el Gobierno se comprometió a tomar medidas drásticas.
El 23 de agosto en la cárcel de Palmasola, dos grupos de internos se enfrentaron por el control del penal, utilizaron palos, armas y garrafas de gas licuado como lanzallamas, lo que provocó un incendio y una explosión. Murieron 35 personas, entre ellos un niño, hijo de uno de los internos.
Para evitar este hecho, se acordaron en la reunión de Santa Cruz varias acciones para ofrecer mejores condiciones a esos internos y evitar los abusos contra los nuevos detenidos.
Coter denunció ayer que los presos de los dos pabellones A y B que se enfrentaron la madrugada del 23 de agosto, siguen con dificultades, “al Pabellón B, el de las víctimas, recién la semana pasada se le ha devuelto el agua, pero todavía siguen sin luz, siguen durmiendo bajo carpas adentro del pabellón”, dijo el prelado.
Avances en un punto
La incorporación de 15 funcionarios de Régimen Penitenciario para el seguimiento de los casos de los internos, es el único punto de los 100 acordados, que se ha ejecutado, agregó Coter.
“De estos puntos ha habido un aumento de personal deL Régimen Penitenciario, antes en Palmasola eran menos de diez las personas que trabajaban haciendo seguimiento de los casos, ahora están alrededor de 25 personas, esto es uno de los puntos donde ha habido un avance, por lo demás de los cien puntos no hay avances”, dijo.
Según el último reporte de la Pastoral Penitenciaria de la Iglesia Católica a nivel nacional los presos alcanzan a unos 14.500, “siguen subiendo”, dice Coter.
Reiteró que la solución al hacinamiento existente en los recintos carcelarios del país, no pasa por la construcción de nuevas infraestructuras ni mucho menos por la promulgación de decretos, como el decreto presidencial de Indulto y Amnistía.
“El indulto se aplica a los que tienen sentencia ejecutoriada, este es el problema, más del 80 por ciento de los reclusos en Bolivia no tienen sentencia ejecutoriada (…) el indulto no es el camino que solucionaba el problema (….), el problema está exactamente en el hecho de que la gente está sin sentencia”, precisó.
Cuestionó, por otra parte, que a dos meses de los hechos que se registraron en Palmasola, las investigaciones no hayan avanzado, “no se mueven y la situación es la misma”, dijo la autoridad eclesial.
“El tema de las cárceles y la agenda pasa por la voluntad de cambiar las cosas, el tema es que esperamos siempre a que ocurran los desastres y después no trabajamos para cambiar las condiciones y nos conformamos con los parches”, sentenció.
En coincidencia con la Pastoral Penitenciaria, el Defensor del Pueblo, la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, plantearon al Gobierno tomar medidas estructurales para resolver el grave problema de la retardación de justicia en el país, así como el elevado porcentaje de detenidos preventivos en las cárceles.
Respaldaron la aprobación del nuevo indulto y amnistía presidencial, pero plantearon que esta medida debía ser menos restrictiva para beneficiar al mayor número posible de internos.
Remoción
Ramiro Llanos ocupó el cargo en dos oportunidades, entre los años 2006 – 2007 y en la última gestión desde enero de 2012 hasta la fecha, en este último caso reemplazó a Jorge Sueiro.
Llanos resaltó como logros de su gestión: la realización del primer Reglamento de Cárceles, recintos penitenciarios sin policías, la lucha contra la corrupción, el cierre del penal de San Pedro, entre otras cosas.
Confrontó situaciones muy complicadas en su calidad de titular de Régimen Penitenciario, como el enfrentamiento entre reclusos en la cárcel de Palmasola de Santa Cruz, que derivó en la muerte de varios internos o también la decisión de cerrar la cárcel de San Pedro en La Paz.
JAVIER ARAMAYO ES EL NUEVO DIRECTOR DE RÉGIMEN PENITENCIARIO
Llanos es destituido del cargo
Ramiro Llanos fue destituido ayer del cargo de director de Régimen Penitenciario, según informó recibió una nota de agradecimiento en la que no se le explican las razones.
“Recibí hace una hora y media (10:30) una nota del área administrativa del Ministerio de Gobierno indicándome que agradecen mis servicios, bueno, con el deber cumplido (me voy), me agradecieron y yo también les agradezco por haberme tolerado todo este tiempo”, confirmó ayer Llanos.
Manifestó que seguro que consideraron que ya eran suficientes los cambios que impulsó en el sistema carcelario.
Agregó que durante el ejercicio de sus funciones hizo todo lo necesario en las cárceles y puso “en su lugar a todos los que se tenía que poner en su lugar, se cerró el penal de San Pedro, se hizo todo lo que se tenía que hacer”.
En reemplazo de Llanos fue posesionado Javier Aramayo Caballero, quien aseguró que la Policía seguirá administrando las cárceles del país, en contraposición a la iniciativa emprendida por su antecesor en el penal de Palmasola de Santa Cruz, donde civiles se hicieron cargo del perímetro interno de ese recinto.
“La Policía Boliviana es una institución fundamental del Estado y esa relación vamos a fortalecer y vamos a ser firmes también con actitudes individualizadas fuera de la ley”, indicó el funcionario.
Además dijo que se debe lograr involucrar a todos los actores de la sociedad en el mejoramiento del sistema penitenciario.
Aramayo, abogado de profesión y hasta ayer jefe del Gabinete del Ministro de Gobierno, Carlos Romero, anunció que este tema y otros serán tratados este fin de semana en el Consejo Consultivo Nacional Penitenciario que se realizará en Santa Cruz con todos los actores para resolver los temas urgentes.
“De manera urgente vamos a trabajar un diagnóstico situacional, pero real y objetivo del sistema penitenciario. De esa manera vamos a encarar un trabajo de priorización de necesidades”, dijo.