Un festival clama por menos violencia

Sexta versión. El evento de la fundación Igualdad LGBT se inicia mañana con 31 filmes. Bolivia participa con cuatro producciones. Dura hasta el domingo.

Diferente, quizás, pero abierto para todo público. Esa es una de las premisas con la que la sexta versión del Festival de Cine de la Diversidad Afectivo-Sexual dará mañana el puntapié inicial en la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), a las 19:30.



Mañana. La cita tendrá una inauguración corta para después dar paso a la primera de las 31 películas, que se exhibirán hasta el domingo en cinco sedes de la capital cruceña. El eslogan escogido es "- violencia + amor" y el presupuesto que se maneja este año asciende a $us 5.000.

Colaboradores. Si bien el festival tendrá cinco sedes, tres de ellas son relativamente nuevas. Se trata de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm), la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (UPSA) y la Escuela Superior de Formacion de Maestros Enrique Finot. A ellas se acoplan la Aecid y el Centro Cultural Franco Alemán (CCFA).

Datos. Hay nueve documentales, siete largometrajes y 15 ‘cortos’ de 15 países. Habrá cinco conversatorios. El primero estará a cargo del activista cruceño Julio César Aguilera. Se presentará el jueves, en la plaza de la UPSA, después de "Gayby" (19:30).

El segundo será el viernes seguido de "Es elemental" (19:30), en la Enrique Finot; lo darán la escritora Claudia Vaca y el docente José Ros. El tercero llegará ese mismo día y a la misma hora, pero en la Aecid, donde Rodrigo Bellot hablará con el público una vez que "Contracorriente" concluya. La última charla se hará el sábado, a las 10:30, en la Enrique Finot. Estarán a cargo José Ros y el pedagogo Fernando Guzmán. Bolivia dirá presente con cuatro producciones: "Libertades para sentir, amar y luchar" (estreno), "Así soy yo", "Donde mis pies me lleven" y "Antonella".

Detalles. El presidente de la Fundación Igualdad, Álex Bernabé, explicó que este año el festival reduce los días y las películas, porque reconoce que no es fácil conseguir los filmes, por varios motivos, como el presupuesto, porque traer una película a Bolivia podría llegar a costar hasta $us 1.350, pero gracias a que algunas se ven en otros festivales de Latinoamérica se gastan solamente entre $us 200 y 270.

Además, por primera vez los organizadores pudieron dirigirse directamente con los distribuidores y así obtener facilidades. Por ejemplo, la producción china no costó nada gracias a los convenios con los encargados, mientras que el filme tailandés se verá en Bolivia, porque se aprovechó un "lobby" en países cercanos.

Sin embargo, Bernabé reconoce que hay avances, como el hecho de que la gente pregunte por el evento o por la colaboración de varias instituciones. Este año apoyan organismos internacionales y el Ministerio de Culturas, no así la Alcaldía y la Gobernación. También se cuenta con los más de 30 voluntarios, que no reciben ningún beneficio económico.

Fuente: www.elsol.com.bo