Evo: Todos me llaman «el yo no fuí»

 

BubyJuan Francisco Gonzales Urgel

Hacer un discurso en papel de oposición es relativamente fácil: ofrecer lo que el votante quiere que le ofrezcan; que sea sostenible, es otra cosa. Muy diferente es el discurso de los que pretenden ser reelectos: deberán dar cuenta de sus actos y fortalecer la credibilidad entre los electores. Algo muy difícil cuando se ha sembrado el camino de contradicciones y peor aún, cuando éstas provienen de fuentes tan antojadizas como el nuevorriquismo y las ansias desmedidas de poder. Así, no queda otro expediente que anotarse como propios los logros ajenos, y como ajenos, los errores que se cometen.



Tal el caso de nuestra economía extractivista y casi mono dependiente de exportaciones de materias primas cuyos precios y mercados no estamos en condiciones de controlar. Vendedores de gas a Argentina y Brasil, los bolivianos enfrentamos actualmente nubarrones que pueden ensombrecer la cacareada “economía blindada” del país. Uno de nuestros clientes, Argentina, actualmente enfrenta dificultades económicas y presiones inflacionarias relacionadas con su deuda externa y su balanza comercial. El default o moratoria de deuda con los llamados “fondos buitres” amenaza con disparar la inflación argentina poniendo en dificultad sus cumplimientos de pago, incluidos aquellos que debe hacer a Bolivia por importación de gas. Sin duda que el futuro cercano obligará a los argentinos a prescindir de insumos externos como el gas, y recurrir a los propios habida cuenta de sus cuantiosas reservas como “Vaca Muerta”.

El otro comprador, Brasil, no está en mejores condiciones. La séptima economía mundial, entró técnicamente en recesión al registrar dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo. Todos los países que tienen relaciones comerciales con Brasil van a sufrir el impacto”, dijo Margarida Gutiérrez, profesora de macroeconomía en la Universidad Federal de Río de Janeiro. “Todo aquel que tenga como comprador a Brasil está teniendo una caída importante en las perspectivas de compras”, indicó desde Buenos Aires el especialista Gustavo Segré, director de Center Group. (BBC Mundo)

A despecho de quienes afirman que en ambos casos los contratos de venta de gas están garantizados, y que las dificultades económicas de nuestros dos grandes vecinos no nos afectarán, olvidan que gran parte de nuestro comercio también depende de las políticas monetarias de los países donde hacemos adquisiciones que -vía legal o contrabando- compiten con nuestra producción interna (formal) de bienes y servicios, sujeta también a la competencia desleal de la informalidad. En otras palabras, las devaluaciones nos afectan directamente.

El Nuevorriquismo invierte

Los planificadores del “Evo Cumple” y del “Proceso de cambio” no tenían entre sus planes que las inversiones como la fábrica de úrea y amoníaco en el Chapare podrían tener dificultades de colocar su producción (cuando produzcan) en mercados externos con problemas de crecimiento como Argentina y Brasil. Similares escollos tendrían las nuevas empresas públicas -que de seis en 2005 pasaron a 23 en 2013- también con el mercado interno. A estas alturas, y según información financiera, dos empresas (Ecobol y Emapa) reportaron el año pasado (2013) pérdidas, otras tres aún no generan ganancias, y las demás están en proceso. “Sin YPFB, el resto es marginal” afirmó el Economista Alberto Bonadona (eju.tv.31.08.14), y nos quedaremos sin saber cuánto han reportado las siembras de canchas de pasto sintético y coliseos sobredimensionados.

Tal vez por ello, resulten llamativas las declaraciones realizadas en días pasados por el Ministro de Economía previendo un «pequeño déficit fiscal» para 2014 debido a que se destinaron recursos al «Plan Patujú», la ayuda a damnificados, la reactivación económica de las zonas afectadas por el desborde de ríos y lluvias, y “la organización de diferentes eventos”.

No nos detendremos en considerar si el “Plan Patujú” ha repoblado los diezmados hatos ganaderos benianos, pero recordamos claramente la resistencia del gobierno a declarar las regiones afectadas como zonas de desastre.

Lo que sí llama la atención es la “organización de diferentes eventos”, en el marco de las recientes denuncias presentadas por el candidato a primer senador de Cochabamba (MSM), Mario Orellana, quien  hizo público un audio atribuido al presidente Evo Morales en una reunión interna quien declara que la cumbre G77 «es la mejor campaña” para el partido (MAS). Algo de cierto deben tener las denuncias del candidato Orellana pues más tardó en presentar el audio de marras, que en caer preso por “sedición”. Escaldados los asesores del gobierno, procedieron el viernes pasado a concluir la reunión del Foro de Sao Paulo realizada en La Paz, (con seguridad uno de los “diferentes eventos” al que hace alusión el Ministro de Economía) sin mucho aspaviento a pesar de que asistieron integrantes de 180 organizaciones de izquierda.

Gasolinazo y subsidios

La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, dice que el gasto en la importación de diésel bajará en un 35% en 2015, para llegar en 2017 a cero de subvención(30.08.14). No explica la Ministra cómo puede lograrse tal objetivo, habida cuenta de que el subsidio tiene al menos dos componentes: los precios internos y externos. Es decir, compra diésel para venderlo más barato. Pero si lo producimos y lo vendemos a menor precio que las cotizaciones internacionales, también lo estamos subsidiando.

Todos me llaman el “yo no fuí”

El 6 de agosto de 2014, Evo Morales, Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia declaró que se habían perdido créditos de Brasil para financiar dos carreteras para la integración entre la zona amazónica y el centro de Bolivia. «Lamento mucho decirlo. Sería un cobarde en no decir la verdad», dijo Morales al explicar que se han perdido los créditos para las rutas San Ignacio de Moxos-Villa Tunari y Riberalta-Rurrenabaque”. Morales aludió como una causa a los problemas surgidos con el primer proyecto debido a la oposición de los nativos del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Secure (Tipnis)(Erbol, 06.09.14). Para este proyecto, había comprometido Brasil inicialmente un fondo de 230 millones de dólares, mientras que para el otro, San Ignacio de Moxos-Villa Tunari, prometió 332 millones de dólares, que han quedado sin efecto.

Sin embargo, años atrás Morales no hizo gestiones para beneficiarse de la solicitud realizada por la administración del Gobierno de Eduardo Rodríguez Veltzé, en 2005, a la corporación Cuenta del Milenio: el desembolso de 598 millones de dólares para infraestructura vial que unificaría a los departamentos de La Paz, Beni y Pando y servicios financieros de pequeños productores urbanos y rurales (13.09.2006).

Claro, dos motivos parecen ser la razón de la sin razón: la pelea con el gobierno de los EE.UU., USAID y la DEA, y un plan de inversiones entre la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) y la empresa china Harzone Industri Corp. para la construcción de dos puentes en el norte del país.

Más fácil es echarle la culpa a los «neoliberales vendepatria» y a los “derrotados” en Chaparina.