Bono escolar llega a 2,2 millones de estudiantes

El presidente Evo Morales entregó el bono Juancito Pinto a estudiantes del colegio Simón Bolívar de la ciudad de El Alto

El presidente Evo Morales entregó el bono Juancito Pinto a estudiantes del colegio Simón Bolívar de la ciudad de El Alto

El presidente Evo Morales inauguró este jueves el pago del bono Juancito Pinto a los escolares bolivianos en la unidad educativa Simón Bolívar de la ciudad de El Alto.

 Unos 2.262.867 estudiantes de primero de primaria a sexto de secundaria de todo el país recibirán desde este jueves hasta el 17 denoviembre el bono Juancito Pinto, incentivo económico que los hace acreedores a la suma de 200 bolivianos.

El jefe de Estado, Evo Morales Ayma, llegó a este establecimiento educativo a las 8:25, momento en que se inició el acto central y de forma paralela se replicó en los nueve departamentos de Bolivia.

Al discurso del mandatario le antecedió la participación del niño Samuel Gutiérrez, que declamó una poesía y se robó los aplausos de los miles de asistentes, entre los que se encontraban jefes militares, autoridades del Ministerio de Educación y de la ciudad de El Alto.



Morales destacó que desde 2006, año en el que se comenzó a pagar el Juancito Pinto, la deserción escolar ha bajado del 6,5% al 1,5%. Explicó que la decisión de realizar este pago fue por el excedente económico de la nacionalización de los hidrocarburos.

¿Cómo cobrar el Juancito Pinto?​Los escolares podrán realizar el cobro del incentivo escolar en el establecimiento educativo que estudian. A estos lugares llegarán, desde este jueves, militares de las Fuerzas Armadas para realizar la cancelación.

Los documentos que deben presentar son: certificado de nacimiento océdula de identidad, además de estar acompañados por su padre de familia o tutor, que también debe presentar algún documento de identidad.

Solo los colegiales que hayan asistido de forma regular a clases durante el año escolar podrán ser acreedores a este beneficio, que busca reducir la deserción escolar.

Fuente: El Deber