La Paz,  23 de julio (Oxígeno).- El Comité Cívico Potisinista (Comcipo), que se encuentra alojado desde el 7 de julio en el coliseo de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), subsisten en precarias condiciones y no tienen asistencia médica adecuada, a pesar de ello dicen estar fortalecidos por la ayuda de algunos voluntarios de La Paz que aportan con alimentos. Las mujeres se sienten presionadas por sus hijos que piden desde Potosí el retorno. A todo eso se suma el temor que sienten tras los últimos enfrentamientos en La Paz.Las centenas de personas que arribaron a la ciudad de La Paz sufren varias necesidades, entre ellas la falta de colchones y camas para pasar la noche, utilizan cartones para no pasar frío. Además no cuentan con un servicio en salud como se acostumbra brindar en este tipo de movilizaciones; sin embargo, dicen que se aproximaron médicos independientes para revisarlos y darles medicamentos.“Nos están amedrentando, ayer a nuestros compañeros les han sacado de los autos para  arrestarlos, el presidente (Evo Morales) no se da cuenta cómo nosotros estamos sufriendo allá. No hay trabajo en Potosí, ¿con qué y cómo vamos a vivir,  a la fuerza tenemos que salir, le pedimos que arregle de una vez el conflicto”, reclamó  Juana R. que acompaña las movilizaciones de Comcipo.La desconfianza por parte de los potosinos tras los enfrentamientos se refleja en las constantes requisas que hacen a los periodistas para confirmar que sea miembro de un medio de comunicación y no así un oficial del servicio de Inteligencia.“En las noches deberían venir a ver cómo están durmiendo los mineros tendiéndose cartones, tienen miedo que los agarren, es una pena como estamos. El Presidente sabe cómo se sufre en las movilizaciones, parece que ya se ha olvidado, porque no quiere dialogar”, lamentó Teresa P.La ayuda de la población paceña no se deja esperar, se sienten agradecidos  por el apoyo, sobre todo, de los comerciantes que les donaron carne, verdura, frutas, coca entre otros. Asimismo, aseguran que desde Potosí les hicieron llegar alimentos.“Los hermanos potosinos tienen derecho a vivir bien, estamos colaborando con lo que podamos, hemos traído pasancallas, cocas y cigarros, somos comerciantes que les queremos ayudar, el Gobierno debería cumplir y hablar con ellos”, informó el comerciante Alejandro V.Las mujeres movilizadas que llegaron junto con la dirigencia, comienzan a sentir la presión de sus hijos que piden que retornen a Potosí, pese a ellos dicen que persistirán hasta lograr que el Presidente del Estado les atienda para que sus hijos tengan mejor futuro.“Tenemos contacto con nuestras familias, están llorando nos dan fuerza y nos piden que retornemos con un resultado, las compañeras como sea nos están apoyando nos han mandado alimentos, nos vamos a quedar hasta las ultimas consecuencias”, dijo Maribel G.